El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través del área de Bienestar Animal, que dirige el concejal Carlos Tarife, del PP, ha encargado un informe para determinar si es posible que la Federación Canaria de Asociaciones Protectoras de Animales y Plantas (Fecapap) “ceda a otra protectora” la gestión del albergue comarcal de animales Valle Colino.

Y es que, aunque se trata de un centro que da servicio a cuatro municipios –Santa Cruz de Tenerife, La Laguna, Tegueste y El Rosario, por el que estos abonan una subvención todos los años–, el Consistorio chicharrero está intentando buscar una solución después de que, tal y como publicó EL DÍA, la Fecapap anunciase su intención de dejar de encargarse del albergue de perros y gatos, y después de que el Cabildo de Tenerife rechazara ocuparse de la gestión y planteara la creación de un consorcio comarcal.

Carlos Tarife comenta que la Fecapap le ha comunicado recientemente al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife que continuará encargándose de la gestión del albergue Valle Colino, situado en el municipio de La Laguna, hasta que se encuentre una solución, “lo que nos da algo de tranquilidad”. Pero ante la negativa del Cabildo a asumir la gestión del centro, el Consistorio chicharrero ha encargado la elaboración de un informe para averiguar si es posible ceder la gestión a otra protectora que esté dispuesta a ello.

“Una vez que tengamos ese informe nos volveremos a sentar con la Federación Canaria de Asociaciones Protectoras de Animales y Plantas para tratar este asunto”, manifiesta el concejal del PP.

Tras conocerse la renuncia de la Fecapap, el edil de Bienestar Animal del Ayuntamiento de la capital planteó que debía ser el Cabildo de Tenerife el que asumiera la gestión de este centro comarcal, manteniéndose, eso sí, la aportación municipal de cada Consistorio. El de Santa Cruz abona unos 194.000 euros al año. Sin embargo, la Corporación insular rechazó tal planteamiento, decisión que ha sido duramente criticada por el concejal Carlos Tarife.

El Cabildo defiende la creación de un consorcio comarcal formado por los cuatro ayuntamientos a los que Valle Colino presta servicio. Ese consorcio convocaría un concurso público para que fuese una empresa la que se encargase de la gestión del albergue de perros y gatos.