El Ayuntamiento de la capital ha abierto un proceso de consulta pública previa para la elaboración de una nueva Ordenanza Municipal de Gestión de Residuos y Limpieza Viaria de Santa Cruz de Tenerife. Esta sustituirá a la norma vigente, aprobada en el año 2001, la cual, según el Consistorio chicharrero, está desfasada y “no da respuesta a la realidad actual”. Entre los objetivos que se persiguen con la redacción de esta ordenanza se encuentra el de establecer un nuevo régimen sancionador “moderno”, que será “clave para la corrección de las conductas infractoras en esta materia”.

Para la elaboración de la futura norma de limpieza de Santa Cruz, el Ayuntamiento utilizará como referencia la Ordenanza Marco de Recogida de Residuos aprobada por la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias) el 30 de mayo de 2019. En esta, la cuantía de las sanciones puede llegar hasta la sorprendente cifra de 1,7 millones de euros. Esta sería la multa más elevada y se tendría que pagar si se comete una infracción muy grave, como el “abandono o vertido incontrolado de cualquier tipo de residuo municipal, cuando se haya puesto en peligro grave la salud de las personas o se haya producido un daño grave para el medio ambiente”.

Uno de los objetivos de esta nueva norma municipal es la correción de las conductas infractoras

Para las infracciones leves, las sanciones pueden llegar hasta los 750 euros. Entre estas se encuentran “depositar residuos sin separarlos por fracciones o en contenedores distintos a los identificados para cada fracción de residuos”; incumplir los horarios de depósito y entrega de basura; arrojar o abandonar residuos en la vía pública o en lugares distintos a los especificados por el Ayuntamiento; y depositar, en lugares distintos a las papeleras, residuos de pequeño volumen como papeles, chicles, colillas, caramelos o cáscaras. Las multas para las infracciones graves, como el incumplimiento de las obligaciones de separación en origen en el interior de establecimientos o en eventos públicos, oscilan entre los 901 y los 45.000 euros.

Pero antes de redactar la nueva ordenanza de Santa Cruz de Tenerife , con la que también se pretende llevar a cabo una “delimitación clara del régimen de derechos y obligaciones de la ciudadanía y administraciones públicas en materia de limpieza y recogida de basura”, el Ayuntamiento ha decidido abrir un proceso de consulta pública para “recabar la opinión de los vecinos y de las organizaciones más representativas” del municipio chicharrero.

La consulta pública, organizada por el área de Servicios Públicos, que dirige el edil Guillermo Díaz Guerra, del PP, estará abierta hasta el 17 de enero de 2021 a través de la plataforma de participación ciudadana del Ayuntamiento de la capital (www.santacruzdetenerife.es/participa). La previsión del Consistorio es que la nueva ordenanza de limpieza y residuos de la capital entre en vigor en diciembre del próximo año.

La Corporación local destaca la necesidad de la elaboración de una nueva ordenanza para Santa Cruz que “responda a los avances normativos, sociales, medioambientales y económicos operados a nivel europeo y nacional, y a la nueva conciencia ecológica de residuos basada en los objetivos de minimización, reutilización, reciclaje y vertido 0”. Asimismo, el Ayuntamiento quiere impulsar todas las recogidas selectivas de residuos que sean viables.