Una fotografía de Andrés Gómez Rodríguez, guardameta del Tenerife entre 1951 y 1964, preside el Bar Terraza que gestiona desde hace siete años su nieta Yaiza Gómez. Portero archiconocido de los aficionados del CD Tenerife a quien todos lo identifican como Cuco, que formó parte del la plantilla blanquiazul que logró el primer ascenso del representativo a Primera División, en el año 1961. Fallecido el 4 de octubre de 2011, el periodista especializado en la historia del club, Juan Galarza, define a Cuco como “como un portero muy sobrio, que ofrecía mucha seguridad a la zaga y al resto del equipo. Con el paso de los años, se convirtió en uno de los estandartes anímicos de la plantilla”.

Tras la conversación de trabajo con el concejal de zona, que se interesó en la afección de las obras en su negocio, la comitiva oficial hizo un alto para revisar la agenda mientras aprovecharon para tomar un tentempié que permitió conocer el lago más humano del Bar Terraza. La vocación futbolera que le inculcó Cuco a su nieta la alimenta su pareja. El fluido verbo del concejal de zona es su mejor arma para bajar balones antes la indignación y el malestar vecinal. Admiten que están indignados por las obras y el momento elegido, “justo después de una pandemia”, pero Tarife gana en las distancias cortas...

La directora de distrito, Marta Vela, escucha el acento de Joaquín que se aproxima a la mesa a pedir la comanda. “¿Tú eres andaluz, verdad?”. El arte con el que le responde el camarero lo delata: “Soy del sur de Bilbao”. Tarife no pierde una y busca la complicidad. Ve que los azulejos de la terraza son verdes y blancos y le espeta, tirándose al ruedo: “Ay, san Joaquín”, en referencia al jugador del Betis. “Ea, precisamente Joaquín me llamo yo”, y se viene arriba la conversación propia de dos aficionados que acaban de ver Teledeportes. Casi sobraba la pregunta, pero Tarife se atrevió –venía vacunado tras el mano a mano vecinal por las obras–: “¿Eres del Betis o del Sevilla?”. “Ella lleva aquí siete años, y yo cuatro. Había una pared roja y la pinté de verde”. Hoy esperan que acaben las obras y esperan poner su terraza también fuera.