Los patinetes eléctricos han llegado a Santa Cruz de Tenerife para quedarse y "la ciudad debe estar preparada". Así lo ha manifestado la concejala de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Evelyn Alonso, quien anuncia que el Ayuntamiento chicharrero elaborará una ordenanza municipal para regular en la capital la circulación de estos vehículos de movilidad personal, con el objetivo de que se puedan convertir en un medio de transporte más.
"Tenemos una asignatura pendiente con el uso de los patinetes eléctricos en el municipio chicharrero. Carecemos de una ordenanza a la que se puedan acoger los usuarios de estos vehículos y también aquellos que no lo son. Existe un vacío legal que debemos resolver desde el área de Seguridad Ciudadana y Movilidad", explica la edil.
Según Evelyn Alonso, ha llegado el momento de que el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife empiece a desarrollar una normativa que regule su uso y que prepare a la ciudad para convivir con los patinetes. "Estos vehículos pueden alcanzar una velocidad de 80 kilómetros por hora y las calles y vías de la capital no están preparadas. Aún así, cada vez se ven más patinetes y debemos apostar por una movilidad sostenible, que no contamine", ha apuntado la edil.
En la actualidad, el uso del patinete eléctrico en Santa Cruz solo se rige por lo dispuesto en la instrucción transitoria publicada en diciembre del año pasado por la Dirección General de Tráfico (DGT) para la regulación de los denominados vehículos de movilidad personal y por algunos artículos recogidos en la Ordenanza Municipal de Tráfico de la capital chicharrera, que entró en vigor en el verano de 2019.
Reglas
Por lo tanto, a día de hoy, son siete las reglas que regulan la utilización de estos vehículos en la capital tinerfeña. En primer lugar, está totalmente prohibido circular con patinetes eléctricos, o cualquier otro vehículo de movilidad personal, por las aceras y zonas peatonales de Santa Cruz, por lo que prácticamente su uso es imposible, debido a que no hay espacio en la calzadas para estos vehículos. Por la noche, si el patinete no dispone de sistema de alumbrado, los conductores deberán portar prendas reflectantes para poder ser vistos. Los menores de 16 años deberán circular con casco de protección por las callas del municipio.
Aquellas personas que utilicen patinetes, y al igual que el resto de conductores, no podrán negarse a las correspondientes pruebas de detección de alcohol y drogas por parte de la Policía. Está totalmente prohibido circular con patinetes mientras se hace uso de cascos o auriculares, y tampoco se podrá utilizar el teléfono móvil. No se podrá circular por la capital tinerfeña a más de 25 kilómetros por hora y está prohibido llevar pasajeros. Las multas por incumplimientos oscilan entre los 100 y los 1.000 euros.
