La capital tinerfeña mantendrá en servicio hasta la segunda quincena de septiembre la mitad de las 701 licencias municipales que integran la flota de este servicio público, como viene ocurriendo desde que pasado 21 de junio se levantó el estado de alarma con la crisis sanitaria del Covid-19. Así lo acordaron ayer los miembros de la Mesa del Taxi, la primera que preside el nuevo concejal de Servicios Público, el popular Guillermo Díaz Guerra, y en la que están representadas las asociaciones que integran los representantes del sector.
En el transcurso de la reunión, Díaz Guerra informó de que Santa Cruz cuenta en la actualidad con 701 licencias, después de que se hayan revocado una treintena por deudas administrativas de sus titulares o faltas de documentación en el vehículo, como no portar la tarjeta del transporte.
Las fuentes consultadas precisan la diferencia entre revocar la licencia -retirar el permiso municipal al titular por infracción y por graves faltas- o rescatar licencias -proceso en el que media un pago como compensación económica-.
Los representantes de los taxistas comunicaron al concejal de Servicios Públicos que, tras un sondeo previo entre sus compañeros, estos son partidarios casi de forma unánime de mantener en activo al 50% de la plantilla cada día y le comunicaron su preocupación porque la economía de sus clientes no termina de despegar. Recordaron asimismo que los primeros días cuando se levantó la alerta el 21 de junio, se notó un aumento en la demanda del servicio, a pesar de que se había incrementado la flota en la calle, pues se pasó del 25% que se limitó durante el confinamiento a la mitad. Sin embargo, en la actualidad se muestran pesimistas.
Según los datos extraoficiales aportados por las fuentes consultadas, un profesional del sector cobra al día una media de 50 euros, teniendo en cuenta que trabajan la mitad del mes y cuando salen ingresan 100 euros. Esa cuantía hay que dividirla por dos y restarle los gastos; en total, un taxista ingresa de manera limpia una media de 25 euros, cantidad insuficiente para subsistir, aseguran.
El concejal de Servicios Públicos hizo suya la propuesta de mantener a diario y en servicio el 50% de la plantilla hasta mitad de septiembre, cuando se convoque de nuevo la Mesa del Taxi, que prevé una reunión trimestral. Será entonces cuando Díaz Guerra plantee si poner en servicio al 75% o restituir ya la normalidad en el sector del taxi.
Otro de los asuntos abordados fue el número de licencias municipales con las que cuenta Santa Cruz en la actualidad. La capital contaba con 740 taxis, hasta que se revocaron veinte y otras nueve siguen los mismos pasos. En total, en la actualidad hay 701 licencias, frente a la ratio de 732 que establece la ordenanza municipal, un número sobredimensionado, según los taxistas, que no se adapta a la demanda del mercado, con el añadido de la incertidumbre turística.
Los taxistas reiteran al ayuntamiento la revisión a la baja de la ratio municipal. El ayuntamiento también se comprometió a informar a la Policía de las licencias que han sido revocadas, ya que al parecer algunas siguen operativas.
Representantes de los taxistas, como Miguel Ojeda, reconocieron el positivismo y el tono conciliador que les transmitió el concejal durante el encuentro.
