El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife iniciará la esperada rehabilitación del histórico cementerio de San Rafael y San Roque en octubre. Así lo ha anunciado el concejal de Infraestructuras, el nacionalista Dámaso Arteaga, después de que la Junta Local de Gobierno adjudicase este lunes, 27 de julio, el proyecto de ejecución de los trabajos a la empresa Dearrolla Obras Y Servicios, por un importe de 588.000 euros. Esta actuación, que permitirá la recuperación de este camposanto, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), deberá llevarse a cabo en un plazo de 12 meses, una vez que arranquen las obras. La previsión es que estas finalicen a finales de 2021.

El alcalde de la ciudad, el nacionalista José Manuel Bermúdez, explica que la aprobación de este expediente supone poner fin a un largo proceso "jalonado de diversas vicisitudes y que permitirá su acondicionamiento e incorporación al patrimonio cultural visitable de la ciudad". "El cementerio es un elemento muy singular de la historia de Santa Cruz y con este proyecto estamos poniendo las bases para que la ciudadanía pueda conocer este Bien de Interés Cultural en todo su esplendor", señala.

Una vez adjudicada la ejecución de los trabajos de rehabilitación, cuyo expediente será notificado al Servicio de Patrimonio Histórico del Cabildo de Tenerife, el Ayuntamiento de Santa Cruz procederá en breve a adjudicar la dirección facultativa de la obra, que se prevé que esté firmada a finales de septiembre o principios de octubre, por lo que será el momento en que se inicie de manera efectiva la remodelación de este emblemático Bien de Interés Cultural del municipio.

El Consistorio recuerda que este proyecto prevé recuperar el diseño original de los portones, católico y anglicano y, mediante la separación, poder enfatizar y distinguir los dos cementerios desde el exterior. Se contempla, además, la eliminación del estanque, y la transformación de dicho espacio en una explanada en la que se puedan concentrar las personas para la celebración de cualquier acto socio-cultural relacionado con el recinto.

La rehabilitación interior consiste en la recuperación de las edificaciones existentes dentro del camposanto, que se encuentran en mal estado, respetando su diseño, materiales y sistema constructivo. No obstante, como espacio que se rehabilita para abrir al público, tendrá que cumplir con los requisitos necesarios y obligados por normativa para este tipo de recintos, con la salvedad que conlleva ser un BIC.

Para poder resolver los condicionantes mínimos de accesibilidad y servicios públicos, el proyecto aprovecha los cuartos traseros al portón católico que se rehabilitan, y se dota de una rampa que conecta de forma accesible los dos cementerios.

Del mismo modo, el proyecto prevé la demolición de la edificación construida en los años 80, consistente en varios cuartos en mal estado, para servicios y almacenamiento, pero que nunca llegaron a ponerse en funcionamiento.

El resto del proyecto se complementa con la potenciación de la vegetación y la jardinería, mediante un proyecto específico, así como la iluminación nocturna y mobiliario urbano necesario en este tipo de edificación abierto al público.

El cementerio de San Rafael y San Roque abrió sus puertas como camposanto en 1810, y las cerró de forma oficial en 1916, después de 106 años de funcionamiento, con la inauguración de Santa Lastenia. Se trata del primer cementerio civil de Canarias, de tipo romántico, y cuenta con dos ámbitos diferenciados: el católico y el anglicano.

La superficie es de 7.155 metros cuadrados. De ellos, el 81,94 % corresponde al cementerio católico y el 12,44%, al británico. Construido por la necesidad de ampliar el terreno para los enterramientos durante la epidemia de fiebre amarilla de 1810, en la actualidad es el fruto de múltiples ampliacione. En este camposanto fueron enterrados ilustres personajes de la ciudad, como Sabino Berthelot, García Sanabria, Ireneo González o Imeldo Seris, ya trasladados al panteón de autoridades, o Secundino Delgado, enterrado en la fosa común que se encuentra en el interior del cementerio. En total, descansan en el cementerio de San Rafael y San Roque más de 30.000 personas.