Acudir a Las Teresitas será, a partir del lunes, en la fase 2 de la desescalada, como aparcar el coche en un concurrido parking. La playa, abierta ya para el baño, se dividirá en 4 sectores y solo se podrá acceder al que esté libre. Completado el aforo establecido, se colgará el cartel de cerrada y habrá que esperar.
Entre las distintas alternativas que se han barajado para evitar aglomeraciones en las playas de la Isla, en las que a partir de este lunes, ya en la fase 2 de la desescalada, estará permitido el baño, el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha elegido para Las Teresitas el control de su aforo a través de la división de la playa en cuatro partes o sectores.
Por lo tanto, los bañistas no podrán colocar su toalla en su zona favorita, sino en aquella en la que les toque, en la que esté más vacía. Asimismo, tendrán que armarse de paciencia, porque puede que se encuentren con el cartel de "playa cerrada", lo que ocurrirá cuando se complete el aforo establecido para Las Teresitas, que se sitúa entre las 4.000 y 6.000 personas, según las mareas. Entonces, los ciudadanos tendrán que esperar hasta que la playa se vaya vaciando.
El Consistorio chicharrero ya ha establecido su protocolo de actuación, aunque, y según matizan fuentes municipales, habrá que esperar hasta hoy, cuando ya se analice el decreto autonómico con respecto al uso de las playas, para que las medidas se conviertan en definitivas. De momento, la intención del Ayuntamiento de Santa Cruz es controlar el acceso a Las Teresitas a través de los cuatro sectores en los que se dividirá la playa, de manera que en cada uno de ellos solo se permita un aforo del 75% , lo que supone entre unas 1.000 y 1.500 personas en cada zona. Estas quedarán diferenciadas a través de la instalación de velas tipo gota de tres metros de altura ancladas en la arena.
El primer sector corresponderá al espacio de la playa comprendido entre los accesos 0 y 2. Este estará reservado a las personas mayores de 70 años y estará prohibida la presencia de niños. El segundo sector se habilitará entre los accesos 3 y 6; el tercero, entre las duchas 7 y 9; y el último entre el acceso 10 y el final de la playa chicharrera.
A partir de una ocupación del 50% del aforo en uno de los sectores, se reconducirá el flujo de bañistas hacia los sectores más desocupados. Cuando toda la playa esté al 50%, entonces se permitirá el acceso controlado por sectores hasta alcanzar el 75% en cada uno de ellos. En este momento, se procederá al cierre de la playa. De controlar el aforo se encargará el personal del servicio de Salvamento y Socorrismo de Las Teresitas, con la colaboración de la Policía Local y de Protección Civil. Se volverá a permitir el acceso, cuando la playa se vaya vaciando.
Asimismo, también se vigilará el cumplimiento por parte de los bañistas de las medidas de distanciamiento social y de seguridad. No se podrán realizar juegos grupales y la distancia entre las personas que se encuentren en un mismo sector tendrá que ser de dos metros como mínimo.
Para mantener a la población informada en todo momento sobre el estado de ocupación de la playa Las Teresitas, el Consistorio informa de que se colocarán carteles en los accesos a la zona de baño y en distintos puntos de la ciudad. También se informará a través de la página web municipal, www.santacruzdetenerife.es, y de las redes sociales para evitar desplazamientos innecesarios y largas colas.
Los quioscos permanecerán cerrados
A pesar de que ya a partir de este lunes, cuando Tenerife entre en la fase 2 de la desescalada hacia la denominada nueva normalidad, estará permitido el baño en la santacrucera playa de Las Teresitas, los quioscos que se distribuyen a lo largo de la zona de baño permanecerán cerrados. Y no porque el Ayuntamiento chicharrero se los haya prohibido, sino porque así lo han decidido los responsables de estos establecimientos, que ya llevan más de dos meses sin actividad alguna debido al estado de alarma por la crisis del coronavirus Covid 19. Los chiringuitos de Las Teresitas están a la espera de mantener una reunión con la alcaldesa, la socialista Patricia Hernández, y con la Dirección General de Costas para poder abrir sus puertas, pues en las condiciones actuales les es inviable. Incluso, uno de estos locales, Isla de Mar, está estudiando tomar medidas legales por la decisión que ha tomado el Consistorio capitalino de dividir en sectores la playa chicharrera y controlar el aforo a través de estos. Para este establecimiento en concreto, la alternativa que ha elegido el Ayuntamiento de Santa Cruz para la apertura de Las Teresitas "provoca que sea imposible que podamos ponernos en marcha". "No se ha tenido en cuenta la opinión de los empresarios y se está limitando la libertad de los clientes para elegir en qué parte de la playa quieren disfrutar de la misma", señala el representante legal del citado quiosco.
