El puerto de Santa Cruz de Tenerife acogió ayer, entre las múltiples operativas que se desarrollaron en sus instalaciones, la descarga de sosa cáustica, que suele producirse una vez al año y que en esta ocasión alcanza un volumen de 1.200 toneladas. Con destino a Ascanio Química, estaba previsto que los trabajos se prolongasen durante unas doce horas. Dicha mercancía llegó por la mañana a bordo del buque Sichem Croisic, procedente de Sevilla, que permanecerá atracado en la primera alineación del Dique del Este hasta el fin de la operativa. Está consignado en la Isla por Honsureste S.L.U.
La última descarga de sosa cáustica en dicho enclave se produjo hace nueve meses, y esta es la primera en que vuelve a materializarse tras la conclusión de una obra considerada esencial durante este estado de alarma y consistente en la reparación de un tramo de conducción de la línea de descarga de productos químicos para la planta de Ascanio Química, vía imprescindible para garantizar los suministros básicos que aseguran su producción. Otra operativa también destacada fue la descarga de 7.700 toneladas de cereales del buque KAN2, consignado por La Luz Market.
En cuanto a barcos que llegaron este miércoles a la instalación santacrucera, atracó en el morro del Muelle Sur el Mein Schiff2, unidad de TUI Cruises, para aprovisionarse de bienes y suministro de combustible.
