Los gestos humanitarios aparecen en los momentos más insospechados y la solidaridad aflora en todo tipo de situaciones. Así le ocurrió a un policía local de Santa Cruz de Tenerife, llamado Juan Carlos. Eran las 22:30 horas del domingo 15 de marzo. Acabó su jornada y se cumplían las primeras 24 horas de la entrada en vigor del actual estado de alerta. Se subió en su vehículo y emprendió el regreso a su domicilio, en el Norte de la Isla. Pero, a la altura del barrio santacrucero de Chamberí, detectó una avería en su turismo. Se puso en contacto con su compañía aseguradora, para que le enviara una grúa que llevara su automóvil al taller en el que lo está reparando.

La empresa del seguro le envió un taxi con licencia de La Laguna para que lo trasladara a su vivienda lo antes posible. El taxista, llamado Antonio, llegó al punto en el que se hallaba Juan Carlos algo antes que el trabajador de la grúa. Y ambos entablaron una conversación. El funcionario le contó que trabajaba como policía local en la capital y que ese día había tenido mucha actividad por las nuevas circunstancias generadas para tratar de frenar que la gente estuviera en la vía pública sin causa justificada. La respuesta del taxista fue sorprendente. Tras comprobar que de verdad ejercía como agente municipal, le explicó que él tenía un coche en un garaje que no utiliza apenas y que, si lo estimaba oportuno, se lo podía prestar para que, durante el tiempo que lo necesitara, lo usara para desplazarse entre su residencia y su puesto de trabajo, en la medida en que es un servidor público que se ocupa de la seguridad de los ciudadanos. Juan Carlos aceptó ese gesto de solidaridad. Ambos acudieron a la vivienda del taxista, que le entregó al agente de seguridad las llaves de su Toyota Corolla. El policía local de la capital tinerfeña utilizó durante dos días dicho vehículo de Antonio, hasta que pudo encontrar una solución alternativa, cuando un familiar le cedió otro turismo a la espera de que el suyo estuviera reparado. Sin duda, Juan Carlos no olvidará ese gran gesto de solidaridad.