Santa Cruz de Tenerife ha incorporado por primera vez guaguas híbridas a su servicio de transporte, para minimizar las emisiones de gases contaminantes en la ciudad, y microbuses accesibles con plazas para sillas de ruedas. Estas guaguas forman parte de los 35 nuevos vehículos de "alta gama" que el Ayuntamiento chicharrero ha adquirido, por un presupuesto de 10 millones de euros, en el marco del plan de renovación de la flota de transporte urbano colectivo de Titsa. También figuran, entre los autobuses comprados, vehículos urbanos de piso bajo y ancho reducido para calles estrechas, y vehículos interurbanos con "características especiales de montaña" para el Parque Rural de Anaga.

Según explica el edil de Servicios Públicos, el socialista José Ángel Martín, el objetivo de la renovación de la flota del transporte urbano es "reducir la edad media de las guaguas para garantizar un mayor confort, fiabilidad y accesibilidad de los viajeros". Añade que al retirar las antiguas unidades, sustituyéndolas por las nuevas adquisiciones, "conseguimos mejorar el rendimiento del transporte colectivo urbano y reducir la contaminación de emisión de gases para preservar el medio ambiente", que es una de las prioridades que se ha marcado el nuevo equipo de Gobierno liderado por la alcaldesa socialista Patricia Hernández.

En este sentido, el también segundo teniente de alcaldesa destaca la adquisición de cuatro guaguas híbridas, las primeras que se pondrán en circulación en la capital. Estas pasarán a formar parte de la línea 910, por lo que cubrirán el trayecto con San Andrés, una de las rutas con más demanda (1,4 millones de usuarios anuales) al conectar la playa de Las Teresitas.

Los cuatro vehículos, cuya capacidad de pasaje es de unas 84 plazas totales, han costado más de 1,6 millones de euros, pues se han adquirido por 420.000 euros cada uno. La previsión es que estén disponibles en el Intercambiador de Santa Cruz antes del 25 de junio, con el fin de que entren en pleno rendimiento lo antes posible y de cara al verano. Tanto al principio como al final de la ruta, que tiene un recorrido de unos 10 kilómetros, se instalarán pantógrafos o puntos de recarga eléctrica para el repostaje de los vehículos. Dichos puntos de recarga han supuesto una inversión de 500.000 euros.

La guagua híbrida minimiza las emisiones de gases contaminantes y también supone un importante ahorro en el consumo de combustible, según señala el concejal. Para realizar sus desplazamientos utiliza dos tipos de energía distintas, combinando un motor de propulsión con un motor eléctrico, por lo que "proporciona una solución más verde para el transporte de pasaje". Martín resalta que las cuatro unidades híbridas adquiridas están preparadas para "evolucionar hacia un modelo cien por cien eléctrico".

El edil aprovecha para informar de que además de con las guaguas híbridas, el servicio de la línea 910 se verá reforzado con otros dos vehículos articulados de 18 metros de largo, que completarán totalmente la renovación de la flota de esta línea en concreto, que soporta especialmente en verano una mayor densidad de pasaje. Estas guaguas han costado 659.760 euros.

Entre las 35 guaguas que el Ayuntamiento ha adquirido también se encuentran cuatro microbuses accesibles con plazas para sillas de ruedas, los primeros con los que contará Santa Cruz. Son vehículos de piso bajo que comenzarán a operar a partir de abril en las líneas llamadas "de baja ocupación", con capacidad para 26 personas, la mitad sentadas y la otra mitad, de pie. Estos autobuses han supuesto una inversión de 634.740 euros.

Asimismo, se han comprado dos guaguas interurbanas con "características especiales de montaña" para la línea 946, que discurre por el Parque Rural de Anaga; diez guaguas urbanas de piso bajo y de 12 metros de largo para reforzar la conectividad de los barrios e implementar las líneas 901, 905, 906, 908 y 911, que realizan el servicio en Ofra y en La Salud; cuatro unidades suburbanas de entrada baja y de 12 metros de largo que cubrirán las rutas con el Suroeste; y nueve vehículos urbanos de piso bajo, de 9,5 metros de largo y de ancho reducido (2,35 metros) que favorece su movilidad por calles estrechas, que entrarán en funcionamiento a partir de junio y que se destinarán a las líneas de la zona centro.

El Acuerdo Marco de Renovación suscrito para la modernización de la flota del servicio urbano de Santa Cruz se extiende hasta 2022. En su primer año de vigencia se renovará el 38,8% de la flota que se necesita para cubrir el servicio diario, es decir, 35 de 90 vehículos, lo que supone el 28,9% de la flota total adscrita al Servicio Urbano de la capital, 35 de 121 vehículos. En cuanto a la antigüedad de la flota, esta se reducirá un 40%, al pasar de 14,3 a 8,5 años de edad media.