El grupo nacionalista del Cabildo de Tenerife afirmó ayer que la celebración del Carnaval en Santa Cruz de Tenerife durante la alerta por viento y calima del pasado 22 de febrero supuso un riesgo para la población. De esta manera, solicitarán en el próximo pleno información sobre la coordinación entre el Cabildo tinerfeño y el Ayuntamiento durante ese día, para intentar conocer los pormenores de la activación del Plan de Emergencias Insular (PEIN), así como las medidas, protocolos y recursos disponibles durante la misma, tanto en Santa Cruz como en el resto de municipios.

El portavoz de CC, Carlos Alonso, aseguró que "la recomendación era no realizar actividades al aire libre, recomendación que se saltó el Ayuntamiento. Aquí hay responsabilidades muy claras para determinar por qué se ha puesto a la población en un riesgo de salud pública".

Por otro lado, el grupo municipal Unidas Podemos en Santa Cruz insta al Ayuntamiento a suspender las actividades al aire libre cuando vuelva a darse un nivel de calima como el que hubo durante el primer fin de semana del Carnaval. Su portavoz, Ramón Trujillo, considera necesario dar una respuesta más exigente desde el Consistorio.

Trujillo también afirma que CC y el PP tampoco habrían suspendido el Carnaval, por lo que sus críticas al equipo de gobierno actual, formado por el PSOE y Cs, por la gestión de la calima, "tienen un componente demagógico que sólo busca erosionar al adversario político". "Este es un asunto serio que debe tratarse con rigor y voluntad de consenso", añade. Y considera que los grupos políticos del Ayuntamiento deben consensuar medidas de protección más exigentes ante episodios de contaminación ocasionales, como la calima.