Las obras para rehabilitar el parque La Granja afrontan su fase final. La conexión de la red de pluviales de este espacio de ocio a la red general será la última actuación de unos trabajos que arrancaron el pasado mes de octubre y en los que el Ayuntamiento de Santa Cruz invierte cerca de un millón de euros.

Estas intervenciones obligarán a desviar gran parte del tráfico de la zona por la avenida Benito Pérez Armas, vía que durante un mes y medio -tiempo estimado para la conclusión de las obras- tendrá que soportar un considerable aumento de circulación de vehículos. Concluida esta actuación, solo restará reasfaltar la zona para concluir el proyecto.

Para afectar lo menos posible al tráfico rodado de la capital tinerfeña, la actuación se iniciará a mediados del mes de marzo, una vez que concluyan los festejos del Carnaval, según detalló ayer el concejal de Servicios Públicos, José Ángel Martín

El tramo de la avenida Reyes Católicos que se verá afectado por la intervención será el comprendido entre las calles Unamuno y la avenida Benito Pérez Armas. Según consta en el proyecto, se duplicarán las rejas transversales de bordillo a bordillo en la calzada en la confluencia de la avenida de Madrid con la calle Unamuno, y en Unamuno con Reyes Católicos.

Del mismo modo, también se colocará idéntico material en la confluencia del camino interior del parque la Granja con la avenida de Madrid, una reja doble en la confluencia de la avenida Reyes Católicos con la calle Gilberto Cayol López, así como un aumento del diámetro del colector de la calle Unamuno.

El edil de Servicios Públicos explicó que se cambiarán todas las tuberías por otras infraestructuras más modernas y con un mayor calibre, de tal forma que permita recoger el agua de la lluvia y evitar así las inundaciones que sufre esta zona cuando se producen precipitaciones de cierta intensidad.

También se aprovecharán las obras para realizar mejoras en la red de saneamiento. En este caso, sobresale la sustitución del colector de saneamiento de la calle Unamuno por uno de mayores dimensiones con ejecución de cuatro pozos de registro circular.

Por otro lado, José Ángel Martín puso en valor las mejoras que, en materia de accesibilidad, se han realizado durante los últimas semanas en el parque.

El edil explicó que estas intervenciones han sido posibles gracias al "ahorro" que se ha ido produciendo en las certificaciones parciales que se han ido abonando a la contrata que ejecuta las obras, Traysesa.

Entre otras actuaciones, y sin sobrecoste alguno para el Consistorio de la capital, se ha mejorado la accesibilidad de los columpios para los niños con movilidad reducida y se ha dotado de sombra a estos elementos.

Al margen de las intervenciones citadas, el proyecto de rehabilitación del parque La Granja ha incluido la sustitución de los pavimentos de tierra de los circuitos para correr por un suelo de polímero. Además, se ha instalado un sistema de riego impermeabilizante.

La construcción del parque La Granja data de los años 70 y su deterioro era muy importante, de ahí la intervención planificada por el Ayuntamiento para adaptar el material y su estabilidad al siglo XXI.