La Junta Directiva del Real Casino de Tenerife emitió un comunicado dirigido a los socios de la entidad para informar de que se ha consumado la expulsión de la misma de Renuka Satyani y de su padre, Kumar Kandesh Satyani, más conocido como Tony, a raíz de que la citada mujer presuntamente cometiera los delitos de amenazas y lesiones sobre otro inversor que reclama una deuda por una elevada cantidad de dinero a la sociedad propiedad de dicha familia.

De esa manera, ambos no podrán volver a entrar en la sede social, ni como socios ni como invitados. Los hechos ocurrieron en el interior de la sede de la institución el pasado 21 de noviembre y la ahora acusada estuvo acompañada por tres matones. Como consecuencia de dicha acción, Renuka fue detenida días más tarde por agentes de la Brigada de Policía Judicial de la Policía Nacional

El comunicado está fechado el pasado 31 de diciembre, fue colocado en el tablón de anuncios y lo firma el presidente del Real Casino de Tenerife, Miguel Cabrera Pérez-Camacho. En el mismo se afirma: "La Junta Directiva del Real Casino de Tenerife ha resuelto -una vez cumplidos los trámites disciplinarios previstos por los Estatutos- expulsar a los socios concernidos por los gravísimos hechos ocurridos el día 21 de noviembre en el interior de nuestra sede social. El Sr. Satyani Satyani y la Sra. Satyani Calderón no podrán acceder a nuestra sociedad como exsocios ni en calidad de invitados".

La resolución final se adoptó después de que finalizara el plazo para presentar alegaciones a dicha propuesta sin que los afectados interpusieron escrito alguno.

El origen del suceso

La víctima principal de la agresión y las amenazas, un intermediario inmobiliario, y otro empresario reclamaban una elevada suma de dinero a la mercantil Satyani de Inversiones por unos servicios prestados. Después de intentar cobrar en diferentes ocasiones sin éxito, ambas personas deciden acudir a los Juzgados para intentar percibir lo que estiman que les corresponde. Y, además, el citado inversor agredido contrata a un abogado de un bufete de Madrid.

En noviembre pasado, dichos miembros de la familia Satyani solicitaron una reunión con el denunciante y su letrado. Este último solicitó para el encuentro una sala al Real Casino de Tenerife y se la concedieron en la primera planta del edificio situado en la Plaza de La Candelaria.

El pasado 21 de noviembre, el inversor y su representante jurídico llegaron al espacio asignado. Y poco después en el Real Casino entraron Renuka con dos matones y su padre con otro hombre musculoso.

Según comprobaron los agentes de la Policía Nacional en las imágenes grabadas por las cámaras de videovigilancia de la entidad, Kumar Kandesh se quedó en la planta baja. Y Renuka y los tres matones subieron a la primera planta.

Cierre de las cortinas

Una vez que todos se hallaban en la sala de la reunión, el inversor presentó a su asesor jurídico, mientras que Renuka señaló con el dedo a los tres matones y dijo: "estos son mis abogados".

Uno de los matones ordenó al abogado que saliera de allí. El letrado tuvo que esperar por fuera del recinto, mientras uno de los acompañantes de los Satyani cerró la puerta y se quedó por fuera para asegurarse de que nadie accediera; ni siquiera el camarero que iba a llevar unos cafés.

Y, por dentro, Renuka cerró las cortinas de los ventanales para impedir que nadie desde el exterior viera lo que iba a ocurrir allí.

Otro matón, con acento de Europa del Este, se dirigió al intermediario inmobiliario para ordenarle: "Quita la demanda". Y, a continuación, presuntamente le propinó a la víctima un golpe a la altura de la oreja y la parte lateral-trasera de la cabeza.

Las palabras de Renuka fueron que eso era lo que le iba a pasar a él y a su familia si no quitaba la denuncia para reclamar la cantidad de dinero.

Tras recibir el golpe, el afectado empezó a gritar y a pedir ayuda a su abogado. Al escuchar a su cliente, el letrado pidió "por favor" al matón que lo dejara entrar, pero este se negó, le dijo que lo "estaban arreglando ellos" y con una mano en un hombro del abogado lo volvió a sentar en su sitio.

Después, los matones, Renuka y Kumar salieron del Casino por la puerta principal.

Miedo del inversor

El inversor golpeado temió por su vida y por la de sus seres queridos. Llegó a plantearse si retirar la demanda económica y dudó si acudir a denunciar las amenazas y la lesión sufrida. Pero, al final, acudió a la Comisaría del Puerto de la Cruz y relató lo que había sufrido. El asunto fue remitido a investigadores de la Policía Nacional de Santa Cruz de Tenerife, que días después procedieron a detener a Renuka, como presunta autora de los delitos de lesiones y amenazas.

Esta empresaria fue puesta a disposición del Juzgado de Guardia de Santa Cruz de Tenerife, que ordenó su puesta en libertad provisional a la espera de juicio.

Los policías nacionales continuaron la investigación para tratar de identificar a los matones que acudieron al Real Casino de Tenerife con camisetas ajustadas, dos de los cuales tienen acento canario.

Al tener conocimiento de la gravedad de los hechos ocurridos en sus instalaciones, el Real Casino de Tenerife decidió incoar un expediente para resolver la expulsión de la elitista sociedad santacrucera de dos de los propietarios de Satyani de Inversiones.