Un centenar de escolares de los colegios San Andrés y Alfonso Spínola (La Alegría) participaron ayer en la jornada Santa Cruz Accesible, con la que el Ayuntamiento de la capital pretende concienciar a los más pequeños de las dificultades que tienen aquellas personas con algún tipo discapacidad para transitar por la capital.

Con la colaboración de organizaciones como la ONCE, Cermi, Movus y Fasican, los pequeños realizaron varios circuitos para tomar conciencia de estas dificultades de movilidad. Por ejemplo, debieron superar un obstáculo con una silla de ruedas o hacer un recorrido con los ojos tapados provistos de un bastón para personas ciegas.

"Hemos aprendido que no hay que reírse de los discapacitados", relató Iván Vilar, alumno del CEIP San Andrés, mientras que su compañera Sofía Morillo reconoció haber aprendido que existen personas con movilidad reducida o con alguna otra necesidad y que, por tanto, hay que ayudarlas "para que puedan superar los obstáculos de la vida". También Noa de Vera León salió convencido de que hay que ayudar a las personas con alguna discapacidad. "Si hubiera alguna en nuestro cole habría que ponerle rampas para que pueda moverse", subrayó.

Precisamente, Florentino Guzmán, concejal de Seguridad, Movilidad y Medio Ambiente, explicó que el objetivo de la iniciativa es que los niños conozcan las dificultades de acercamiento a la ciudad que tienen aquellas personas con alguna discapacidad "Han podido observar que hay muchas barreras para otro tipo de ciudadanía", recalcó.

Para el próximo año, el presupuesto municipal destinado a mejorar aspectos que tienen que ver con la accesibilidad se incrementa un 10%, con lo que alcanzará los 750.000 euros.

Las actividades escolares de ayer fueron el prólogo de los debates que se desarrollarán hoy en el Parlamento de Canarias.