Los quioscos de la playa de Las Teresitas, en Santa Cruz, aseguran que se han visto obligados a "reducir de manera sustancial el personal empleado en cada establecimiento", debido a la "presión ejercida" por el Ayuntamiento. La Asociación de Quioscos de Las Teresitas alerta de la pérdida de clientes por los horarios de cierre de los chiringuitos y por los controles que la Policía Local "hace de manera diaria en la playa". Con respecto a los horarios, Urbanismo ha rechazado la petición realizada por los quiosqueros para ampliar el cierre, el cual debe coincidir, según se recoge en un Decreto del Consistorio, "con el ocaso".

Los empresarios solicitaron que los establecimientos pudiesen estar abiertos hasta las doce de la noche, pero la Gerencia Municipal de Urbanismo ha contestado que la playa de Las Teresitas no cuenta con las condiciones óptimas de iluminación y con los elementos necesarios que garanticen la seguridad de las personas. El horario de los chiringuitos será, a partir de ahora, de 11:00 a 18:00 horas.

En relación a los controles policiales, la asociación señala que "el formato seguido en las diligencias llevadas a cabo, en primera instancia, para atajar problemas externos a los empresarios, como pueden ser el botellón o fiestas nocturnas en los vehículos, no ha sido el adecuado o eficiente, sino que ha afectado a la totalidad de los usuarios y no solo a los que ocasionan los verdaderos problemas".

La Junta Directiva de la Asociación de Quiosqueros de Las Teresitas se reunió el pasado lunes para analizar la situación en la que se encuentran los negocios, sobre todo con respecto a la relación de estos con el Consistorio chicharrero y en el marco del pliego de condiciones que rigen las concesiones administrativas de los chiringuitos.

Deficiencias

En este sentido, denuncian que en el concurso público convocado por el Ayuntamiento para instalar nuevos quioscos en las Teresitas no se tuvo en cuenta que "las deficiencias evidentes que presenta la playa, tanto en seguridad, como saneamiento, iluminación y demás servicios, iban a ocasionar que los pequeños problemas que pudieran surgir se convirtiesen en grandes problemas que han afectado a la economía de las inversiones" que realizaron los empresarios, "las cuales han llegado a incrementarse hasta en un 50% de lo previsto inicialmente".

"Llamemos a estos gastos por su nombre, como el saneamiento de sanitarios y aguas residuales, vigilancia a cargo de empresas externas, y roturas de grupos electrógenos y carburantes", añaden los quiosqueros, quienes consideran que dichos gastos, "en vistas de que son problemas ajenos a las empresas", deberían ser asumidos "por la administración competente para ello".

Asimismo, los chiringuitos de Las Teresitas aseguran que en otros municipios las concesiones administrativas otorgadas por los ayuntamiento a empresarios "no son tan estrictas y carentes, en ocasiones, de sentido". La asociación pone como ejemplo los decibelios autorizados, en cuanto al sonido que pueden emitir los locales. No se pueden sobrepasar los 50 decibelios con la música. "Una conversación normal entre dos personas supera ya los 50 decibelios", explican los empresarios, quienes no ven "lógica" esta medida.

Por ello, la asociación solicitó a Urbanismo autorización para ampliar los niveles de ruido hasta los 85 decibelios, "toda vez que solo los generadores", que los empresarios se ven obligados a utilizar porque no hay electricidad en la zona, "superan ya esta medición". La Gerencia ha remitido dicha petición al área de Seguridad y Medio Ambiente.

Respeto

Los quiosqueros de Las Teresitas reclaman más "respeto, atención, seriedad y celeridad" por parte del Ayuntamiento en cuanto a dar respuesta a sus necesidades y reivindicaciones, que, "en última instancia, son las mismas que las de los miles de usuarios de la playa". Exigen al Consistorio que atienda, entre otras, sus solicitudes para habilitar almacenes junto a los chiringuitos y zonas de carga y descarga, e insta a la Corporación local a dedicar más esfuerzo al control del tráfico y del botellón y "menos energía a la búsqueda de fallos a la actividad de los empresarios".

Los empresarios, que destacan "la fuerte inversión y esfuerzo" que estos han realizado en la playa, reivindican la mejora de la misma por parte del Ayuntamiento. Creen, además, que la colaboración entre todos los actores implicados "puede llevar a recuperar la Bandera Azul para Las Teresitas, solo hace falta que el Consistorio deje de obstruir la generación de más empleo y riqueza en la ciudad, y si no lo hace, tendrá que explicárselo a los santacruceros".

Por último, los quiosqueros aseguran que han solicitado en varias ocasiones poder reunirse con la alcaldesa de la capital, la socialista Patricia Hernández, con el fin de "buscar fórmulas para dar solución a las cuestiones que se han ido suscitando desde la concesión; no obstante, no se ha obtenido respuesta alguna".