El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife limitará a tres al año los eventos y espectáculos públicos que se vayan a celebrar en el recinto ferial. Esta es la principal novedad del decreto aprobado el pasado 26 de junio por el concejal de Seguridad y Medio Ambiente, Florentino Guzmán, documento que regula la contaminación acústica en este tipo de celebraciones en el municipio.

La medida, según recoge el propio decreto, está consensuada con los vecinos de Cabo Llanos, que se reunieron con el anterior equipo de gobierno, formado por CC y PP, el pasado mes de mayo. En varias ocasiones, los residentes en esta zona de la capital se habían quejado de los ruidos que generaban las celebraciones organizadas en esta zona, pero, sobre todo, aquellas que se desarrollaban al aire libre, en puntos como la explanada del Parque Marítimo.

En todo caso, Florentino Guzmán dejó ayer la puerta abierta a que se puedan producir cambios en este punto. "El área competente del Cabildo de Tenerife está aún en formación y tengo pendiente una reunión con el recinto, cuando haya un consejero/a responsable del área, para seguir trabajando sobre este decreto", detalló.

El edil aclaró que este decreto se publica todos los años, y con él se actualiza la normativa sobre ruidos que está vigente. "Es prácticamente el mismo que el año anterior, con este cambio señalado, que surge tras reuniones con colectivos vecinales de los alrededores del recinto ferial", sostuvo. El nivel máximo de emisión para este espacio no sobrepasará los 96 dBA.

Además del aspecto citado, el decreto sobre las limitaciones del ruido en el municipio también sugiere, en el apartado de Carnaval, que se planifique para que el conocido como "cuadrilátero del carnaval" se vaya reduciendo y la actividad festiva se concentre en la zona de plaza de España y aledaños, así como en las nuevas que se generen hacia la zona portuaria.

"Los técnicos del área sugieren que determinados eventos tienen que ir ordenándose. Y el Carnaval, en su momento, vino momentáneamente al recinto por la modificación de la plaza de España. Son sugerencias; todo depende del ordenamiento de la ciudad y de los espacios que hayamos ido ocupando con respecto al puerto", puntualizó Florentino Guzmán, quien recordó que el ayuntamiento recibirá en septiembre la segunda fase del espacio portuario, lugar al que, en su momento, se podrán trasladar "eventos importantes de la ciudad".

El decreto establece que por parte del promotor de las fiestas (Carnaval) se redactará un proyecto global de impacto acústico que abarque la totalidad de las instalación y actos previstos. Es más, aquellos que no estén incluidos en la documentación técnica aportada no podrán tener actividad musical, salvo aquellos establecimientos debidamente acondicionados y que dispongan previamente de título habilitante al efecto.

En el caso del Carnaval, según establece el decreto, el control de sonido se realizará siempre con limitador acústico registrador. El máximo de emisión en cada actividad será de 96 dBA, salvo en los grandes escenarios del Carnaval, que será de 105 dBA. También tendrán 96 dBA como límite vehículos, carrozas y similares, así como las demás actividades, como quioscos o barras exteriores.

En las calles estrechas (Pérez Galdós, Parque Bulevar, El Clavel y aledaños) se aplicará como máximo el nivel reducido de 85 dBA.