"Si alguien pensaba que yo iba a abandonar mi responsabilidad de luchar por Santa Cruz por estar en la oposición, entonces es que no tiene ni idea de cómo soy". Así lo manifestó ayer, y tras más de dos semanas de silencio, el que fuese alcalde de la capital durante los últimos ocho años, el nacionalista José Manuel Bermúdez, quien ofreció una rueda de prensa para dar a conocer la línea de trabajo que llevará a cabo el grupo municipal de Coalición Canaria (CC), desde la oposición, a lo largo de este mandato. Bermúdez y el resto de concejales nacionalistas se han comprometido a "estar al lado de los vecinos y a no defraudarles", realizando una oposición "sensata y responsable". "Porque nosotros no somos demagogos, somos gente de fiar", ha indicado.

El exalcalde destacó que, aunque ahora, "por una cuestión aritmética", sean el PSOE y Ciudadanos los que dirigen la ciudad, fue su partido el que ganó las pasadas elecciones en Santa Cruz, "logrando unos 5.600 votos más que en 2015 y 4.000 votos más que el PSOE, la segunda fuerza más votada; ganando por primera vez en 20 años en los cinco distritos del municipio; y aumentando el número de concejales, pasando de nueve a diez". "Estos datos representan para este grupo municipal un capital político indiscutible y muy importante. Seguiremos luchando por Santa Cruz desde la oposición y estaremos a la altura, fiscalizando al nuevo equipo de Gobierno", apuntó. Bermúdez aseguró que en su equipo no se producirá ninguna baja en los próximos cuatro años, a excepción de la protagonizada por Lucía Dorta, que "ha tenido que dejar su acta de concejal por razones laborales, pues es funcionaria". Ocupará su lugar Purificación Dávila.

El presidente del grupo municipal de CC, acompañado por seis de los diez ediles, pues el resto no pudo acudir a la rueda de prensa "por motivos laborales", señaló que todo el equipo trabajará con ilusión y motivación desde la oposición". Comentó que ha tendido su mano y la de todo el grupo municipal de CC a la nueva alcaldesa, la socialista Patricia Hernández, y al nuevo Gobierno local, formado por el PSOE y Cs, para lo que necesiten, "pues para nosotros lo más importante es esta ciudad".

Eso sí, insistió en que "realizaremos una labor de fiscalización y vigilancia responsable, apoyando lo que consideremos bueno para Santa Cruz y rechazando aquello con lo que no estemos de acuerdo". Para ello, los concejales de CC se han repartido las diferentes áreas municipales, con el fin de proceder a su fiscalización. En este sentido, José Manuel Bermúdez anunció que el grupo municipal de CC concederá un "periodo de gracia de 100 días" al nuevo Gobierno local, para que "tomen las riendas del municipio". "Otros no lo han hecho nunca, pero nuestro estilo se basa en el respeto institucional", agregó.

Pero a pesar de este periodo de gracia, aclaró, en el caso de que "se produzca un ataque a nuestra gestión, responderemos". "Si el equipo de Gobierno empieza desde le minuto cero a mirar hacia atrás en lugar de hacia adelante, nosotros contestaremos", manifestó el exalcalde nacionalista.

También aprovechó para agradecer los "numerosos" mensajes de "apoyo y de aliento que hemos recibido" por parte de vecinos de Santa Cruz y de otros municipios, "tanto a través de las redes sociales, como por teléfono y por correo electrónico". "Hemos dejado un Ayuntamiento más eficaz, moderno y saneado, con numerosos proyectos en marcha que nosotros iniciamos. Le deseo suerte a la alcaldesa y que resuelva los problemas de Santa Cruz. Y si alguien piensa que gobernar esta ciudad es fácil, está equivocado", apuntó José Manuel Bermúdez.

Con respecto al expediente de expulsión abierto a los dos ediles de Cs, el exalcalde manifestó que este partido "tendrá que resolver sus problemas". Y sobre la posibilidad de que se lleve a cabo una moción de censura en el Consistorio chicharrero, el exalcalde aseguró que su grupo "no está conspirando, sino centrado en liderar la oposición y en no defraudar a los vecinos".