El área de Seguridad del Ayuntamiento de Santa Cruz aplicará de forma progresiva la recién estrenada Ordenanza de Seguridad que entró en vigor el pasado viernes, una nueva normativa con un contenido importante y que supondrá un periodo de transición para poder desarrollarla.

En este caso, las denuncias vecinales sobre la actividad de gorrillas y de la mendicidad en los semáforos que se sigue realizando en el municipio han provocado un nuevo debate acerca de la aplicación de la reglamentación aprobada en el último pleno por el anterior gobierno.

Cinco días después de la aprobación del nuevo texto, que sustituye al anterior y que estaba en vigor desde 1985, la actividad de los gorrillas no ha cesado y sobre ello, el concejal del área de Seguridad, Accesibilidad y Medio Ambiente capitalino, Florentino Guzmán, aseguró que su aplicación "no será estricta de momento", y aunque no se dejará de actuar, "se abre un periodo de transición para aplicar la nueva ordenanza" sobre esta actividad y la de la mendicidad en los semáforos, "que es, incluso, más peligrosa si cabe".

Recordó que "la aprobación de la Ordenanza de Tráfico se produjo en el último pleno de la corporación y, supuestamente, fue poco participativa. Ahora entró en vigor el viernes y lo que pretendemos es tener un periodo de transición para su aplicación", motivó el responsable.

Para ese desarrollo "vamos a aplicar una perspectiva informativa sobre su aplicación, que necesitará de una estrategia informativa de ámbito pública y externa y otra de carácter interna".

Sobre la primero apuntó que "la campaña electoral marcó la imposibilidad de explicar la ordenanza a través de una campaña informativa para difundir sus principales aspectos. Ahora, también, está la perspectiva interna, para informar a nuestros propios servicios para la aplicación de la misma".

"Es por ello por lo que queremos darnos un plazo de uno o dos meses para ver qué medidas podemos aplicar y sobre todo evaluarlas, qué medidas son correctivas, cuáles son mejorables y cuáles podemos seguir consensuando con las alegaciones que se presentaron en su momento", añadió.

Florentino Guzmán quiso dejar claro, no obstante, que "la aplicación de la norma no será fácil en relación de los aparcacoches y de la mendicidad en los semáforos. Es un problemática importante. En el primer caso se tendrían que destinar muchos recursos policiales para vigilar en todo el municipio. Eso sí, si alguien coacciona hay que llamar a la Policía y estaremos ahí".

"Con la mendicidad en los semáforos, es una cuestión que hay que afrontar con perspectiva múltiple, sobre todo porque habrá que analizar la situación de cada persona, entre otras cuestiones. Y esta actividad puede acarrear riesgos en materia de seguridad vial", advirtió para concluir.