El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través del equipo redactor del Plan General de Ordenación (PGO), y el Cabildo, a través de los técnicos del área de Patrimonio Histórico, preparan el que será el nuevo catálogo de protección de inmuebles del municipio. Entre los trabajos que se están llevando a cabo se encuentra la valoración de cada uno de los 550 edificios que la Corporación insular cree que deberían estar incluidos. La Gerencia Municipal de Urbanismo prevé recibir el listado en julio y proceder, a partir del mes de septiembre, a la suspensión de las licencias de demolición y de obras que se hayan otorgado hasta ahora por parte del Consistorio.
Fuentes del Cabildo tinerfeño y del Ayuntamiento chicharrero señalan que ambas administraciones están acercando posturas, dejando atrás las diferencias existentes entre los técnicos de las dos instituciones, puestas de manifiesto sobre todo a raíz de las licencias de derribo que el Consistorio capitalino otorgó a propietarios de antiguas casas del barrio de Miraflores, situado en el centro de la ciudad.
Documento autónomo
La elaboración del nuevo catálogo de inmuebles protegidos de Santa Cruz de Tenerife se realiza en el marco del proceso en curso de elaboración del futuro Plan General de Ordenación de la capital tinerfeña. Eso sí, el anterior concejal responsable del área de Urbanismo, Carlos Tarife, del Partido Popular (PP), ahora edil de la oposición, tomó la decisión política, según él mismo lo recuerda, de separar el catálogo de protección del patrimonio de la redacción del Plan General, para poder elaborarlo como un documento autónomo y no tener que esperar hasta que se aprobase el nuevo PGO, "lo que podría tardar unos cuatro años aproximadamente".
Tarife señala que en las reuniones que mantuvo con el equipo redactor del nuevo Plan General de Ordenación hace dos semanas este le indicó que "se estaba avanzado en la elaboración del nuevo listado para el catálogo de protección de inmuebles del municipio". "La hoja de ruta que se marcó es que el documento se presentaría en julio, y que ya entre septiembre y octubre se llevaría al Consejo Rector de Urbanismo la suspensión de las licencias que se hayan otorgado para inmuebles que finalmente sean incluidos en el catálogo".
Una vez que se apruebe la suspensión de las licencias también se empezará con la tramitación ambiental del catálogo, con el fin de que este esté aprobado de manera definitiva y entre en vigor en el año 2020.
Con el nuevo catálogo del patrimonio de Santa Cruz de Tenerife quedará claro cuáles son los inmuebles protegidos del municipio, por lo que el Cabildo y el Ayuntamiento dejarán atrás sus diferencias en este asunto.
