No sin dificultades previas, pues ha sido un proceso largo y complejo, el Ayuntamiento de Santa Cruz y el colectivo juvenil Azarug han suscrito el acuerdo que permitirá que la citada asociación pueda gestionar la conocida como Casa Taucho, ubicada en el número 64 de la calle General Serrano, en el barrio de Duggi.

La firma del acuerdo se produjo hace unos días por parte del alcalde, José Manuel Bermúdez, y del concejal de Patrimonio y Recursos Humanos, Juan José Martínez, y dos representantes del colectivo de jóvenes, entre ellos su presidente, Jorge Ariosto.

"El acuerdo tiene ventajas para todas las partes porque, por un lado, el ayuntamiento tiene la cesión de un inmueble cuya situación está regularizada por la Tesorería General de la Seguridad Social, y, por otro, permite a Azarug, previa regularización como entidad de utilidad pública municipal, hacer uso de él", detalló Martínez.

Salvado este escollo, el consistorio podrá sacar a licitación las obras del inmueble, para cuya rehabilitación están presupuestados más de 170.000 euros y seis meses de trabajos. El proyecto está aprobado desde hace más de un año y medio. La intención del consistorio es que las obras se inicien a comienzos del año próximo.

Cabe recordar que hace unos meses, cuando estaba prevista la firma del acuerdo, la Tesorería rechazó el convenio que había presentado el ayuntamiento, al no aceptar el modelo de relación que establecía el consistorio con el colectivo Azarug.

En todo caso, la negociación con la Tesorería General de la Seguridad Social, propietaria de la vivienda, arrancó en 2016, tras la orden de desalojo del colectivo de jóvenes que dictó el juzgado y que, gracias a la mediación del consistorio, se paró en el último momento.

Tras varias negociaciones, el ayuntamiento logró que la entidad estatal cediera el inmueble por un periodo de 25 años, y más tarde acordó con Azarug que cedería el inmueble para que pudieran seguir desarrollando allí sus actividades.

A cambio, Azarug deberá conservar el inmueble en perfecto estado de uso, tanto interior como exterior, una vez lo reciba del ayuntamiento, que es depositario del mismo.

"Es una satisfacción poder decir hoy que el uso y disfrute de este inmueble se desarrollará a partir de la entrega de las llaves con total acomodo a la normativa de aplicación, después de resolver un procedimiento dilatado y complejo en el tiempo", recalcó ayer Juan José Martínez.