Cuesta definir las cantidades que se destinan a cada fin, porque las autoridades solo supervisan que los barcos tienen los permisos necesarios para atracar y que el producto ha pasado los controles sanitarios exigidos, pero parte de la arena que llega al Archipiélago procedente del Sáhara se usa en el sector de la construcción.

Así lo detallan distintas fuentes consultadas por este periódico, que aclaran, en todo caso, que esto se produce desde hace años, aunque el asunto cobre actualidad cada cierto tiempo.

De hecho, la Orden de 6 de agosto de 2001 de la Consejería de Política Territorial y Medio Ambiente del Gobierno de Canarias ya recoge que como usos habituales de estas arenas procedentes del Sáhara se encuentran el de la construcción, asfaltado y otros, entre ellos la regeneración de arena de algunas de las playas de las Islas.

Eso sí, el material procedente del continente africano debe ser sometido previamente a determinados tratamientos, cuando proceda de canteras superficiales, con el objeto de evitar que puedan transportar algún elemento contaminante.

Así lo fija también la citada orden. Entre otros tratamientos, la arena debe ser fumigada con productos químicos. Tras la aplicación se procederá a un tiempo de espera para su manipulación y transporte, de al menos 12 horas.

Además, se realizarán cribados y lavados en agua salada. Este proceso consiste en que durante la descarga la arena pase por cribas de distinta luz de malla (0,5-2 mm) y eliminación por incineración de la materia resultante de la criba.

Posteriormente la arena fina se sumerge en tanques de agua salada favoreciendo el contacto y movimientos de toda la masa de arena con el agua y tras un período de inmersión de 3 horas se separa la parte orgánica que queda en suspensión, que igualmente será incinerada.

Las arenas también se someten a esterilización térmica, tratamiento que consiste en que durante la descarga la arena sea sometida a altas temperaturas. Si se aplica calor seco, el rango de temperaturas oscila entre los 221-232º durante 2 minutos; entre 110-120º durante 16 horas; o con calor húmedo a 120º durante 30 minutos.

El asunto ha cobrado actualidad tras la denuncia formulada por el Frente Polisario a comienzos de esta semana, que acusó a las autoridades españolas y canarias de ser "cómplices" del "expolio" de los recursos naturales del Sáhara, tras haber permitido el desembarco en el puerto de la capital de un cargamento de arena saharáui.

En este caso fue el carguero Deimos, que navega bajo la bandera de Panamá, el que transportó la arena, aunque durante los últimos meses han sido otros barcos los que han llevado a cabo esta labor.

El Polisario se quejó también de que hay varias denuncias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que establecen que Marruecos y el Sáhara Occidental son dos territorios distintos y separados y que estas actividades deben contar con el consentimiento del pueblo saharáui.