ENDOCRINOLOGÍA Y NUTRICIÓN

Tejido adiposo pardo: qué es y cómo activar esta fórmula, que ayuda a prevenir la obesidad

Siempre se ha pensado que el tejido adiposo pardo solo tenía como función producir calor y mantener la temperatura corporal en cuando bajan los grados, ya que la grasa parda se activa con el frío

¿Qué es y cómo activar el tejido adiposo pardo que ayuda a prevenir la obesidad?

¿Qué es y cómo activar el tejido adiposo pardo que ayuda a prevenir la obesidad? / PEAKSTOCK - Archivo

Los datos de la obesidad son alarmantes. Y España es uno de los países con mayor porcentaje de personas con sobrepeso u obesidad.

El 61,6% de los españoles tiene un Índice de Masa Corporal (IMC) superior a 25, lo que se clasifica como sobrepeso, y el 23,8% mayor de 30, lo que entra dentro de los parámetros de obesidad.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que 2,8 millones de personas mueren cada año en el mundo a causa de la obesidad o el sobrepeso. 

Y es que, más allá de las consecuencias de la propia obesidad o del sobrepeso, es un importante factor de riesgo de enfermedades no transmisibles como:

Tejido adiposo pardo o marrón

El tratamiento inicial de la obesidad pasa por hacer cambios en la pauta alimentaria y por el aumento de ejercicio físico.

Pero en la actualidad existen incluso medicamentos específicos para esta enfermedad. Porque, como precisan los expertos, la obesidad es una enfermedad

Obesidad infantil.

Más del 30% de los niños españoles tiene obesidad o sobrepeso / Shutterstock

Es el caso, por ejemplo, de Tirzepatida, un fármaco que se inyecta una vez a la semana y que aumenta la sensación de saciedad a la vez que regula la grasa corporal.

Se trata de un tratamiento para "ganar salud" que, además, disminuye la tensión arterial, previene la diabetes y ayuda al control del colesterol.

En el Día de la Obesidad, que celebran conjuntamente la Sociedad Española de Obesidad (SEEDO) y la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), se ha dado a conocer una de las líneas de investigación más "prometedoras" en el ámbito de la obesidad. 

Y es el tejido adiposo pardo o marrón. Como explica el catedrático Francesc Villarroya, del Departamento de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Barcelona, es "un lugar del organismo donde se queman calorías procedentes de la dieta".

“Se activa con temperaturas bajas”

Siempre se ha pensado que el tejido adiposo pardo solo tenía como función producir calor y mantener la temperatura corporal cuando bajan los grados, ya que la grasa parda se activa con el frío.

Pero ahora hay una buena noticia:

  • Se sabe que también el tejido adiposo es un sistema de protección para “quemar” el exceso de alimentos que ingerimos con la dieta y evitar que se depositen en exceso en forma de grasa blanca y que originan la obesidad.

Por eso, “no cabe duda que activar la grasa parda daría lugar a una prevención en el aumento de peso, e incluso permitiría disminuir el peso de una persona con obesidad”. 

Hasta el día de hoy, se ha intentado activar la grasa parda a través de fármacos, pero todos los intentos han generado efectos secundarios cardíacos, por lo que, apunta el profesor, “superar esta limitación actual es una activa línea de investigación en ese ámbito”.

Ventajas de la grasa parda

Tal y como resalta el doctor, un estudio reciente llevado a cabo con 150.000 pacientes en Estados Unidos confirma los efectos saludables de la grasa parda.

Esta investigación ha mostrado que, además de proteger frente a la obesidad, las personas con grasa parda activa muestran protección frente a diabetes y a enfermedades cardiovasculares (desde el infarto al ictus).

  • “Se cree que el tejido adiposo pardo libera a la sangre factores hormonales, que ejercen una acción saludable sobre el sistema cardiovascular”.

“Identificar cuáles son y cómo actúan estos factores hormonales es una línea de trabajo prometedora, ya que se podrían utilizar en un futuro como herramientas de tratamiento y prevención de enfermedades graves y muy frecuentes en los pacientes con obesidad”.

¿Cómo activar el tejido adiposo pardo y perder peso?

Aunque no estamos hablando de recetsa “milagrosas”, hay fórmulas muy efectivas, con prácticas cotidianas, que pueden ayudar a activar el tejido adiposo pardo:

  • El ejercicio físico, que ha demostrado sus efectos beneficiosos para el organismo. Aumenta el gasto energético por sí mismo, mejora el estado metabólico e inmunológico, y promueve la activación de la grasa parda.

Para mantener un buen estado de salud, la OMS recomienda realizar al menos 150 minutos a la semana de actividad física moderada, lo que supone unos 25 minutos al día.

Además de los beneficios comentados, también disminuye los dolores musculares y de espalda, fortalece los huesos y articulaciones, preserva la salud cardiovascular y mantiene la calidad del sueño.

  • Las temperaturas altas son el enemigo de la “grasa quema grasa”. Así, el profesor recomienda aumentar la actividad al aire libre y moderar las temperaturas ambientales interiores, y más ahora con el uso de la calefacción.

“Las altas calefacciones y la falta de actividad al aire libre se consideran cada vez más como parte del ambiente obesogénico de nuestra sociedad”.

“Sin investigación no se puede avanzar”

Coincidiendo con el Día Mundial de la Obesidad, la Sociedad Española de Obesidad (SEEDO) y la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) han reivindicado la vital importancia de la investigación para luchar “contra la epidemia del siglo XXI”, que se estima, afecta al 39% de los niños españoles de 7 a 9 años.

La profesora Gema Medina-Gómez, del Grupo de Trabajo de Investigación Traslacional de Obesidad de la SEEDO, señala que:

  • “La investigación es la clave para conseguir un mundo sin obesidad"

Porque el estudio tiene un papel importante en el “conocimiento de la obesidad como enfermedad, para:

  1. Poder llegar a un diagnóstico precoz
  2. Para evitar otras enfermedades asociadas a la obesidad
  3. Para desarrollar futuros tratamientos”.

También coincide la doctora Irene Bretón, presidenta de la Fundación de la SEEN (FSEEN) y miembro del Comité Gestor del Área de Obesidad, que puntualiza que “en esta enfermedad, como en otras, sin investigación no se puede avanzar”.

  • “Con progresos significativos que están permitiendo una medicina más personalizada en obesidad, siendo posible no solo identificar los factores que influyen en cada persona sino también elegir el tratamiento más adecuado”. 

Y deja claro que la obesidad no tiene un origen “únicamente por un estilo de vida inadecuado y no es una responsabilidad exclusiva de la persona que la padece”.

Esta percepción de la sociedad y de la propia ciencia “condiciona que aún no se le preste a la investigación en obesidad la importancia que merece”.