APARATO DIGESTIVO

Pancreatitis aguda: Síntomas y tratamiento de la enfermedad digestiva más frecuente

Un enfermedad que aparece de forma repentina y que tiene una incidencia de 50-80 casos por cada 100.000 habitantes/año

La pancreatitis es la inflamación del páncreas. Una glándula que se localiza detrás del estómago y cuya función principal es ayudar a descomponer los alimentos y hormonas para controlar los niveles de azúcar en sangre.

La pancreatitis es la causa más frecuente de ingreso hospitalario por enfermedades del aparato digestivo y suele aparecer de forma repentina.

Según la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), tiene una “elevada” incidencia en la población:  50-80 casos por 100.000 habitantes/año.

Como explica el doctor Francisco José García Fernández, gastroenterólogo en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, “se trata de una enfermedad de evolución imprevisible y potencialmente grave”. 

La pancreatitis requiere ingreso hospitalario. La resolución del cuadro clínico se produce varios días del inicio de los síntomas “con medidas bastante sencillas”

  • “Es necesario vigilar la presencia de complicaciones, que puede darse hasta en el 20% de los casos. Tiene una mortalidad global de un 5%, pero en las formas graves puede alcanzar más de un 30%”.

La pancreatitis se puede manifestar en dos modos clínicos. 

Por un lado, pancreatitis leve, que es aquella que cursa con la mínima disfunción de órganos y la recuperación del paciente se produce sin ningún contratiempo.

Por otro, la pancreatitis grave o aguda. En este caso, se asocia a un fallo orgánico y que puede desencadenar en otras complicaciones como necrosis (parte del páncreas se destruye debido a su inflamación), absceso o pseudoquiste.

Síntomas y causas de la pancreatitis

El síntoma más característico de esta enfermedad es el dolor abdominal, que se localiza en la parte superior del abdomen, justo debajo del esternón.

Un hueso que se ubica en la parte delantera y central de la pared torácica y que está unido a la clavícula y las siete primeras costillas.

  • “Es típico que el dolor se mantenga los primeros días y que se alivie inclinando el tronco hacia adelante. Algunos pacientes pueden presentar un dolor más leve y solo un 5-10% de los pacientes no tienen dolor”, indica la doctora Susana Jiménez Contreras, del Hospital Vithas Xanit Internacional, Benalmádena (Málaga).

La causa de la pancreatitis también va a indicar la localización del dolor. Si se debe a "piedras" en la vesícula biliar, se localiza en la parte alta y derecha del abdomen. Generalmente, el cuadro clínico comienza tras la ingesta de alimentos.

En cambio, si es producido por el alcohol, aparece entre 1 y 3 días después de su consumo.

Además del dolor abdominal, a diferencia de la pancreatitis causada por litiasis (cálculos en las vías urinarias), se acompaña de náuseas y vómitos.

Pero no es el único síntoma que presenta la pancreatitis.

  • Fiebre.
  • Taquicardia (aumento de la frecuencia cardíaca).
  • Náuseas.
  • Vómitos.

En casos seleccionados también se administran antibióticos y si aparecen complicaciones se puede recurrir al tratamiento endoscópico, radiológico y/o quirúrgico

Doctora Mileidis Sanjuan Acosta

— Gastroenteróloga en el Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria, Tenerife

Puede ser causada por varias causas.

No obstante, como resalta el especialista, “la litiasis biliar y el consumo de alcohol es el responsable de más del 80% de los casos”. 

  • “Entre estas otras causas hay que destacar: hiperlipidemia (lípidos en la sangre), ciertos fármacos, malformaciones como el páncreas divisum (anomalía congénita), reducción del flujo sanguíneo (isquemia), traumatismo abdominal, infecciones, pancreatitis autoinmune o pancreatitis hereditaria”.

Sin embargo, estar diagnosticado con diabetes aumenta considerablemente las probabilidades de padecer pancreatitis. Y al revés.

La pancreatitis crónica puede desencadenar en la aparición de esta enfermedad, por la que el cuerpo es incapaz de regular los niveles de glucosa en sangre.

Diagnóstico y tratamiento

Dolor abdominal, náuseas o vómitos, junto a fiebre, son síntomas evidentes de un posible caso de pancreatitis aguda. Por ello, hay que acudir inmediatamente al médico, quien confirmará el diagnóstico con una analítica de sangre.

Además de una analítica (en la que si hay pancreatitis hay una elevación en sangre de amilasa y lipasa), se puede realizar una ecografía abdominal.

Es la única forma de descartar que el dolor abdominal esté causado por un cálculo biliar.

El tratamiento de la pancreatitis es la hidratación adecuada.

Mientras cursan los síntomas, se debe evitar la ingesta oral de alimentos, para que el páncreas “descanse”. Eso sí, si la hospitalización se alarga en el tiempo, se debe administrar alimentación por vía intravenosa.

Respecto al dolor abdominal, se trata con analgésicos. Si es agudo, con opiáceos.

La doctora Mileidis Sanjuan Acosta, del Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria, Tenerife, especifica que “en casos seleccionados también se administran antibióticos y si aparecen complicaciones se puede recurrir al tratamiento endoscópico, radiológico y/o quirúrgico”.