Aunque la astenia suele relacionarse con la llegada de la primavera, lo cierto es que después del verano vivimos una situación similar. Recuperar la rutina después del verano requiere a veces de una dosis extra de energía que no tenemos. Pero la alimentación y el aporte de los nutrientes necesarios puede ayudarnos a superar este escollo.

Uno de los micronutrientes más necesarios son los minerales, esenciales en distintos procesos metabólicos de vital importancia para el organismo. Si quieres superar la desgana en la vuelta a la rutina, aporta a tu organismo los siguientes minerales:

Zinc

El zinc es un mineral esencial para el funcionamiento del sistema inmune, ideal para evitar los resfriados y gripes propios de estas fechas del año cuando las temperaturas empiezan a bajar. Está presente en alimentos como los guisantes, las ostras o los cangrejos.

Hierro

El hierro nos ayuda a combatir la astenia posvacacional porque nos ayuda a reducir la sensación de fatiga. Nos ayuda a empezar el otoño con más energía y evitando la caída del cabello que se produce tras finalizar el verano. Lo encontrarás en espinacas, alubias o berberechos.

Magnesio

El magnesio es un mineral que también contribuye al fortalecimiento del sistema inmune. También es muy importante para afrontar los nuevos retos que nos ponemos tras el final del verano, como hacer más ejercicio, gracias a su influencia en la musculatura. Puedes encontrar el magnesio en alimentos como las lentejas, las nueces o la avena.

Potasio

El potasio interviene en la formación muscular y en algunas funciones neuronales del organismo, así que no puede faltar en tu dieta tras la vuelta de las vacaciones. Está presente en alimentos como las patatas, las zanahorias o las espinacas.

Selenio

El selenio es uno de los minerales que ayudan a evitar el envejecimiento del organismo y nos ayuda a fortalecer la salud tiroidea. Puedes encontrarlo en mayor cantidad en el jamón, las sardinas o las nueces de Brasil.