El invierno está a la vuelta de la esquina y, lejos de apetecer los gazpachos o cremas frías tan propias del verano, empiezan a aparecer las ganas de tomar caldos y sopas calientes.

Los platos calientes se han convertido en una de las apuestas principales de las dietas de invierno porque no solo son muy buenas para nuestro cuerpo y nuestro organismo sino que tiene una gran cantidad de propiedades beneficiosas para perder peso.

Inmersos ya en pleno otoño, las sopas son las grandes aliadas para adelgazar. Pero, hay un caldo en concreto que es muy bueno para conseguir el objetivo de llegar a nuestro peso ideal.

Es una sopa muy buena porque es depurativa y está llena de nutrientes.

Estos son los beneficios de la sopa de cebolla.

Perder peso y fortalecer el sistema inmunológico

La sopa de cebolla es un caldo esencial para perder peso pero, además, es muy muy buena para fortalecer el sistema inmunológico.

Entre otras de sus ventajas, se encuentra lo fácil y rápido que es hacer este plato.

La cebolla es un alimento diurético y depurativo, muy bajo en caloría y saciante. Además, un truco que vamos a desvelarte es que, si la cebolla la consumes cocida, se potencia aún más su poder adelgazante.

Por otro lado, la cebolla tiene un gran poder diurético cuyo objetivo es el de evita la retención de líquidos y estimula la actividad gástrica.

Debes consumir este caldo durante siete días para empezar a notar los resultados, pero es importante que tengas en cuenta que no es conveniente abusar de su uso ni consumirla más de una semana de forma consecutiva.