No se cierra en Navidad, la liga de Ministros demandados y Sálvese quien pueda

Muchos ya estaréis cansados de ver a gente abriendo botellas de cava y brincando porque le ha tocado el Gordo de navidad. Y es que el 22 de diciembre es eso y la portada de este número de hoy será eso. Cuando yo entrego estas letras aún no se ha celebrado el sorteo. Pero seguro que no soy uno de los que brincan. Que bastada. Y es que como dice Don Arturo Perez- Reverte y también Carlos Prallong, en su libro – por cierto gracias Federico- hoy vivimos en la tiranía de los imbéciles, pero tampoco es cuestión de mencionarlo mucho que me censuran. Que de eso hay; censores. En todos lados. Y es que imbécil, no es un insulto, yo jamás me atrevería a usar el insulto y menos por escrito. Y es que si pensábamos que lo habíamos visto todo, de eso nada, ahora aparece Sánchez en el «Especial navideño de Injurias y Calumnias» y el primer capitulo se titula «Cuéntame cómo meterse con los Jueces», ahora el Juzgado de Primera Instancia número 98 de Madrid lo ha citado para un acto de conciliación. La fecha, el próximo 12 de febrero. El motivo, que llamó «delincuente confeso» al empresario González Amador, conocido como el «novio de Ayuso». Porque aquí, si no tienes un drama con tu nombre, no eres nadie.

Resulta que al novio no le hizo gracia que el presidente mencionara sus chanchullos en Bruselas, así que le ha presentado una demanda y solciita de indemnización 100.000 . «Delincuente confeso», dijo Sánchez, con la misma soltura con la que el camarero de cualquier restaruante en estos días te dice, esta lleno, no hay mesa. Claro que el empresario está siendo investigado por presuntos delitos fiscales, pero oye, ¡eso no significa que se pueda decir en voz alta! Lo que se dice, y es que no vale todo, para algunos si para otros no. Y ojo, que luego vienen los líos.

Pero Sanchez, no está obligado a aparecer en el acto de conciliación, como no lo hizo su cheerleder Montero. Lo cual es lógico, porque debe estar ocupado con sus ministros y familia para calmar el tsunami que está por venir.

Y es que hay que dejar expresarse a los políticos, para eso son aforados, Oscar Lopez llamando prevaricador a Peinado, el juez que instruyo o de la mujer de su jefe, Oscar Puente llamando pueriles a los miembros del Supremo, y es que no hacen mas que seguir la voz de su amo, que se explaya atacando al poder judicial, para ellos todo son bulos. Y es que esto de aforados, es muy chachi, que se lo digan a Abalos que tiene tiempo para preparar su defensa hasta que llegue el Suplicatorio del Congreso que se votara a finales de Enero del año próximo.

Sobre todo esto Europa toma nota mientras nosotros comemos cotufas. Porque si algo sabemos aquí, es que un buen discurso político siempre viene con acusaciones de regalo, seguido de la palabra bulo, ultraderecha y poner a parir a Poder Judicial, cuya Audiencia Nacional la deja ya uno de los nuestros, creo que para irse al orden de donde procede, al Militar, ósea Sala Quinta del Supremo.

Asi que estamos ante La Liga de los Ministros Demandados y es que

González Amador, que parece haber sacado un bono de demandas, también ha incluido a medio gabinete en su cruzada. Está hasta Félix Bolaños, - me han dicho- al que pide 50.000 euros porque dijo que «entre los delincuentes confesos y los fiscales que dicen la verdad, el Gobierno se queda con los fiscales». Si eso no es un titular digno de la prensa rosa en lo que se ha convertido la política, que baje el niño Jesus y nos diga algo.

Y no olvido a María Jesús Montero, que también está en el ojo del huracán por afirmar que Ayuso vivía en un piso pagado con fraude fiscal. Porque en este reino, cada ministro lleva en su maletín una buena dosis de gasolina para avivar las llamas del escándalo. Y eso hacen. Gobernar poco. Y trabajar pues eso, a partir del 2025 menos, pues se reduce la jornada lo adelanto “ la Yoli” con la firma de sus acompañantes, comemariscos, como los llama Garcia Antolin. Pero ya me adelantan hace escasos minutos, que esto es solo una operación de marketing político, una puesta en escena que no cuajará.

El Tribunal Supremo tampoco ha querido perderse la fiesta. Ha admitido una demanda contra María Jesús Montero, quien ahora se enfrenta a otro episodio de este interminable «Sálvense quien pueda». Por unas modestas declaraciones en el Senado, la ministra ahora tiene que explicar cómo se atrevió a insinuar que los familiares de Ayuso podrían estar metidos en fraude. Es decir, el pan de cada día en cualquier sobremesa y es que cansa y la gente no se entera y pasa de uds.

Para rematar, resulta que la Fiscalía presuntamente filtró correos entre el abogado de González Amador y el fiscal. Estos emails acabaron en la prensa, como quien pierde el paraguas en un día de tormenta. Ahora, el fiscal general del Estado también tiene su propia trama por revelación de secretos. ¡Que no falte nadie en este desfile! Y que los whtasapp que borró hoy dice la UCO que los puede recuperar.

Todo esto es como un after propio de la movida madrileña, pero sin Alaska ni Mario, que estos están en todos lados. Cansinos por Dios. Pero lo pasamos bien, tenemos a un grupo de políticos y empresarios sacándose los trapos sucios mientras el pueblo los mira, con una caña fresquita, si puede ser. De Aldama, Koldo, Abalos, ahora Rato con su condena y algún que otro más, esperando el próximo giro de guion. Cada declaración es un hit, cada demanda, un «remix» que suena en los despachos judiciales y mis compañeros al menos facturan. Siempre hay más problemas que abogados.

Así que aquí estamos, en el reino que todo lo judicializa y la palabra «conciliación» suena más a una broma que a una solución. por lo que pienso que los que realmente gobiernan este reino son los Jueces con sus resoluciones, como árbitros poniendo cordura ante tanto despropósito. Menos mal, que pasan de la ofensiva del Gobierno por los casos que le asedian. ¿Y la justicia? Pues de vacaciones no está, como algún imbécil espeta en Navidad. Cierran los Juzgados ¿no? Mi niño. La justicia se moderniza, Bolaños aprobó el Jueves 19 su plan, que es la mayor reforma organizativa que se recuerde, con la inclusión de la mediación antes de ir a los juzgados. Y llegan los tribunales de Instancia. Esto se pone interesante.