La productividad debe basarse en un compromiso social

La productividad de una empresa puede verse afectada por muchos factores internos y externos. Algunos de los factores internos más importantes son la cohesión social, la energía y motivación de los empleados, la eficiencia en los procesos de producción, almacenamiento, distribución y administración, el uso adecuado de los recursos, maquinaria y tecnología, y la auditoría de las actividades para saber cuándo aplicar una corrección de ser necesaria.

Por otro lado, algunos de los factores externos que pueden influir en la productividad de una empresa son la competencia, la economía, la política, la tecnología y la cualificación para el empleo.

Para mejorar los recursos importantes para los procesos de productividad en una empresa, hay algunas medidas que podrían ayudar junto a un sistema de objetivos, objetivamente evaluables:

La automatización de los procesos de producción, almacenamiento, distribución y administración puede mejorar la eficiencia y reducir los errores humanos.

La digitalización de documentos y procedimientos puede mejorar la eficiencia y reducir el tiempo y los costos asociados con la gestión de documentos en papel.

La modernización de los procesos y la tecnología utilizada en la empresa puede mejorar la eficiencia y reducir los costos.

La adopción de una buena gestión de recursos humanos puede mejorar la eficiencia y la motivación de los empleados.

La planificación y organización adecuadas de las tareas y proyectos pueden mejorar la eficiencia y reducir el tiempo perdido en tareas innecesarias.

La priorización de tareas puede ayudar a los empleados a enfocarse en las tareas más importantes y mejorar la eficiencia.

La comunicación y el trabajo en equipo pueden mejorar la eficiencia y la cohesión social.

La evaluación del desempeño puede ayudar a identificar áreas de mejora y mejorar la eficiencia.

La adopción de metodologías de mejora de procesos puede ayudar a identificar áreas de mejora y perfeccionar la eficiencia.

Paradójicamente estas mejoras son fácilmente implantables en el sector público, por lo que los empresarios, sindicatos y Administración pública debemos priorizar el retorno a la productividad público-privada como antesala a la recuperación sostenible de la economía y de la eficiencia de la sociedad.

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