Un brindis por la inauguración de la zona de baño de El Bloque

Hace más de treinta años que un mal día hizo que la inquietud recorriera Anaga. Un trozo del antiguo Santa Cruz marinero, quizá el último reducto con sabor a callao y a mar de siempre, iba a desaparecer. El barrio de Valleseco se revolvía intranquilo e hizo de la placita su lugar de encuentro y de acuerdos para las batallas que había que librar. Nombró a sus representantes y todo el barrio unido puso manos a la obra para luchar en contra de las sucesivas agresiones privatizadoras que llegaban por parte de la Autoridad Portuaria, el Cabildo, el Ayuntamiento... Muchas veces eran concesiones a dedo que tenían como meta transformar el origen e identidad chicharreras en una zona comercial y anodina, paisajes que se repiten hasta la saciedad en muchos rincones de nuestra geografía, despersonalizándolos. No se puede hablar de Santa Cruz y el mar sin la historia que lo conforma y Valleseco defiende con su espacio marinero ser parte de ella. Y no de cualquier manera.

Entre lucha y lucha, asambleas, negociaciones, manifestaciones y celebraciones, ha habido logros que a largo de los años se han ido concretando en propuestas para rehabilitar este espacio de playas y el de Ligrasa. Es el caso del recordado proyecto de La Maqueta y el de Sol y Sombra. El primero se perdió en la noche de los tiempos. Para el segundo, una representación del barrio, que viajó a Gran Canaria y se plantó a las puertas de un Consejo de Ministro, consiguió que Zapatero incluyera en los presupuestos de 2010 diez millones de euros para comenzar las obras. Pero la suerte es caprichosa y ofrece su resistencia. No sólo nos ha costado tener en Madrid a alguien que nos defienda, sino que cuando lo conseguimos, el PP eliminó nuestros millones de los presupuestos por la crisis financiera.

Todo nos lo hemos ganado a pulso. En la actualidad, el Ayuntamiento, el Cabildo, el Gobierno de Canarias y la Autoridad Portuaria han impulsado una adaptación del proyecto Sol y Sombra que avanza en Ligrasa, aportando diversas cuantías a un presupuesto inicial de cuatro millones de euros que Nueva Canarias consiguió en Madrid a instancias de la Comisión para la Defensa de la Playa de Valleseco. Ahora ha tocado inaugurar la obra de adecentamiento de El Bloque, en el extremo norte de la costa de Valleseco, producto de la respuesta del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife al sentir general.

Es pues día de celebración en el que procede brindar para fortalecer la frágil memoria de la gente que, con su participación y valor, ha mantenido nuestro legado, una auténtica marejada democrática que recorrió los barrios y ha permitido que este entorno costero no desaparezca, se rehabilite y se cuide.

Ya podemos bañarnos en El Bloque, y es Carnaval, fecha que también ha servido de excusa para disfrutar defendiendo esta zona. Recordemos la Escuela de Samba Carioca en la que más de quinientas personas ensayaban en las naves carboneras, bajo las instrucciones de Vicente Cruz; los pasos de la difícil samba para acompañar a nuestra comparsa, repartiendo rica sangría en cosos y cabalgatas desde una carroza que simbolizaba las naves que no queríamos perder.

Brindemos pues por la capacidad chicharrera de organizarse y defender con imaginación nuestras tradiciones e historia, nuestro ocio y calidad de vida. Y qué mejor brindis que el recuerdo de las murgas que nos acompañaron, adaptando para la ocasión alguna de las numerosas letras que nos han dedicado.

Si tu quieres refrescarte en lugar lindo y seguro / en la playa de Valleseco podrás remojarte el... cubanito

El barrio de Valleseco / tiene bloque, tiene playa / conseguidos con la fuerza de la lucha ciudadana.

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