eldia.es

eldia.es

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Joaquín Rábago

Bruselas quiere sanciones casi universales contra el petróleo ruso

La Comisión Europea pretende aplicar al petróleo ruso sanciones tan completas como las impuestas en su día por Washington al crudo iraní o venezolano.

Es al menos lo que se desprende de una de las disposiciones incluidas en el borrador preparado por Bruselas pero a la que no se refirió, sin embargo, públicamente la presidente de la Comisión, Ursula von der Leyen.

Según el periodista especializado Nikos Chrysoloras, de Bloomberg, ese documento habla de prohibir la asistencia técnica y financiera, además de los servicios de transporte del petróleo ruso cualquiera que sea su destino.

La Comisión intenta prohibir tanto a las aseguradoras como a las compañías dedicadas al transporte marítimo controladas por europeos que faciliten la exportación del petróleo ruso a Asia u otros continentes.

Ocurre que tal es el caso de hasta el 95 por ciento de la cobertura de los seguros de responsabilidad civil de los petroleros.

A lo que se suma el hecho de que el 60 por ciento del transporte lo llevan barcos también europeos, en su mayoría con bandera griega, lo cual crearía una situación caótica en el comercio mundial de petróleo.

De ese modo trata la Comisión Europea de evitar que Rusia reoriente sus exportaciones de petróleo hacia países como la India, como ha empezado a hacer.

Las ventas de petróleo ruso a ese país asiático se han duplicado en relación con el año pasado aunque todavía son limitadas.

Tercer país del mundo en consumo de petróleo, detrás de EEUU y China –importa el 80 por ciento de su petróleo–, la India importa el 80 por ciento de sus necesidades.

India lo compra principalmente a Irak, Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, EEUU, Nigeria e incluso a México y Brasil.

Desde la invasión rusa de Ucrania, los países de la UE han gastado más de 20.000 millones de dólares en la compra de petróleo ruso, beneficios cruciales para el país de Vladimir Putin ya que representan el 40 por ciento del presupuesto ruso.

Las exportaciones de petróleo ruso a la Unión Europea valen más del doble que las ventas de gas, según Noah Gordon, del Carnegie Endowment for International Peace.

Las sanciones europeas entrarían en vigor a finales de año, pero hay países centroeuropeos que han expresado preocupación por la celeridad de esas medidas.

Tanto Eslovaquia como la República Checa dicen necesitar más tiempo mientras que Hungría, cuyo Gobierno tiene lazos estrechos con Moscú, es quien ha expresado mayor oposición a las mismas.

La OPEP, organización a la que no pertenece oficialmente Rusia, pero con la que colabora a la hora de poner límites a las exportaciones de petróleo, se resiste a aumentar su producción para que suban los precios del crudo.

Algunos economistas, explica Gordon, prefieren la aplicación de aranceles punitivos al petróleo ruso porque contribuirían a una importante reducción de los ingresos de ese país por las ventas de crudo.

Rusia se está viendo ya obligada a vender el petróleo por ejemplo a los países asiáticos como la India con descuento, algo que aprovechará sin duda también China.

Compartir el artículo

stats