Ha dicho Pedro Sánchez, en una entrevista de Prensa Ibérica, que los proyectos para acceder a los miles de millones de fondos europeos “no pueden ser localistas”, sino que deben ser “vertebradores de país”. O lo que es lo mismo, afectar a dos o más comunidades autónomas. Y con eso y un bizcocho, nos comeremos dos chochos. O sea, que ya nos podemos ir olvidando en Canarias de que nos llegue un céntimo. Me dirán ustedes con quién vamos a vertebrar nosotros, que aún somos una región invertebrada.

La única esperanza que nos queda es que Pedro Sánchez no suele distinguirse por cumplir su palabra. O sea, que dice una cosa y termina haciendo la contraria. Pero con esto de la pasta gansa de Europa el caminar de la perrita es francamente preocupante. Será directamente el Consejo de Ministras, Ministros y Ministres el que va a decidir a qué grandes empresas de Madrid, Cataluña y País Vasco van a ir los miles millones de esta campaña electoral de casi tres años.

Pero alto. No se tire por el puente todavía si es usted el propietario en Canarias de una cafetería o un pequeño comercio. El presidente también ha dicho que habrá “planes específicos” para determinados territorios donde el turismo es el motor de la economía. ¡Qué nervios! ¿Verdad? ¿Le darán una línea de crédito para que sobreviva un año sin clientes? ¿Le perdonarán impuestos y tasas durante el tiempo en que estemos en cero turístico?

Mejor pensado, tírese por el puente. No, amigo, amiga o amigue. Porque lo que le van a financiar son “proyectos de transición ecológica”. O sea, cosas como que en vez de tener la cafetera conectada a una red eléctrica que consume asquerosos hidrocarburos, recibirá energía limpia de unas placas solares colocadas en el techo de su propio edificio. Es cierto que una vez hecha la transición a la modernidad, la máquina seguirá apagada, porque no habrá nadie para tomarse el café, ni usted tendrá dinero para comprarlo. Pero eso son minucias.

A estas alturas de año el Gobierno de Canarias no ha conseguido que el Ministerio de Hacienda español aclare si va a dar prórroga a las inversiones que había que materializar en Canarias este maldito año de la COVID. Y si no hay prórroga, a muchas empresas se les puede caer la peluca con el fisco. Pese a las cariñosas promesa de Sánchez, no hemos recibido ninguna noticia de que exista un Plan de Rescate para el turismo de las islas. No existe el menor atisbo de que vayamos a recibir ni un euro extraordinario. Y a pesar de que llevamos meses y meses peleando por ello, ni siquiera hemos podido conseguir que nos autoricen los test de antígenos para los escasos viajeros que aún tienen el valor de venir a las islas de vacaciones, a pesar de que se lo ponemos lo más difícil posible.

No es solo que todo vaya mal. Es que además nos ha tocado la peor clase política para enfrentarnos a la mayor calamidad. La más incompetente.