Leemos con preocupación un supuesto conflicto ambiental entre los responsables del cuidado del medioambiente: Seprona, agentes insulares de medioambiente, juzgados... por la supuesta ocupación de unos m2 por una de las explotaciones ganaderas más importantes del Norte de La Palma.

Hemos de tener presente que se ha declarado protegido un 50% de la superficie insular, con un planteamiento genérico... mapa de colores, sin acuerdo, ni negociación con los agricultores y ganaderos, afectando en muchos casos usos tradicionales (agricultura, ganadería, corte...), propiedad privada entre otros sin amojonamiento y lo que es lo más importante sin partida presupuestaria por los responsables políticos, de acuerdo con la superficie supuestamente protegida, lo que hace unos años gestionaban miles de agricultores: leña, madera, carbón, ramas para el ganado, estiércol, horquetas agrícolas, etc... ahora se declara protegido... ¿de quién?

Hemos de buscar puentes que amorticen usos tradicionales con conservación, ya que hoy supone la mayor superficie forestal que ha tenido la isla en los últimos doscientos años... pasando los suelos de pastos y cultivo de más de 40.000 hectáreas años 1950, a unos pírricos 8.000 en estos momentos, doblándose la superficie forestal en dicho periodo en más de 30.000 hectáreas. Tenemos ejemplos de pinares, ahogando antiguos cultivos de almendros, higueras, vid, en el NW de la Isla, pinares que rodean núcleos de población en Fuencaliente o ahogan palmeras y tierras de pastos, tabaibas en Mirca, Velhoco, etc..., castaños compitiendo con laurisilva en Breña Alta, palomas rabiles bajando a la costa en el N de la Isla, que decir de Puntallana y Barlovento, zonas pobladas rodeadas de monte verde, zarzales... La actividad agroganadera es una actividad social y ambiental.

La granja en cuestión mantiene un cultivo de plátanos ecológicos de los más importantes de La Palma, plátanos que tienen mercado al Norte de Los Pirineos, mientras que los cultivos tradicionales se quedan en muchos casos para pica, un 15% en estos momentos, valga como referencia que dicha explotación genera más de 20 puestos de trabajo, limpia amplias superficies de monte haciendo prevención en la lucha contra los incendios forestales, siendo complementaria la actividad forestal, ganadera y agrícola.

Necesitamos tender puentes entre la administración, los campesinos y las autoridades; técnicos y políticos hemos de establecer criterios de sostenibilidad contando con el ayer y el hoy, porque el mañana es parte de una cultura que en estos momentos parece olvidada, ignorada por un marco teórico, separado de la historia básica, para entender el hoy y el mañana.

Esto no es un problema de mapas de colores con mediciones en centímetros o metros cuadrados, los problemas ambientales y sociales no los podemos separar, son un todo.

Wladimiro Rodríguez Brito

(Exconsejero de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife)