Nadie se pone de acuerdo. Nadie quiere ceder. Tenemos un país y unas islas bloqueadas. Los partidos políticos llevan desde el 26 de mayo a nivel local y desde el 28 de abril a nivel nacional negociando para formar gobiernos de todo tipo. Incluso en el Parlamento Europeo han tenido problemas para ponerse de acuerdo. Lo nunca visto. Esos señores europeos siempre llegaban a acuerdos. Tan guapos ellos, y qué sueldos. Es el bloqueo.

Nuestro voto es importante, y de hecho lo que pedimos son Gobiernos de estabilidad, si son de tranquilidad mejor. ¿Es lo que ustedes querían, no? El Congreso de los Diputados está sin comisiones desde el 28 de abril, o sea, sin trabajar. ¿Lo ven normal? Dos meses mirando al cielo, cobrando ya un sueldo. Ay, señor. Luego dicen que la gente no cae en el aburrimiento y la melancolía. Entiendo el cabreo de la gente.

Menos mal que éramos un país evolucionado. Si esa es la capacidad de diálogo que prometieron antes de las elecciones, guárdame un cachorro. Pasan los días. En Canarias, los Cabildos siguen bloqueados y a medio gas. Sin acuerdos firmes en Tenerife y Gran Canaria. En La Palma tampoco. Más de dos meses después. Como suelen decir, "tanto va el ratón al molino hasta que deja el rabo en el camino". Mucho ratón para poco molino creo. Pónganse de acuerdo. Y si no, váyanse todos a tomar por donde cargan los camiones.