Todavía quedamos quienes opinamos sin miedo a las amenazas. Ayer amenazaron e insultaron por las redes a mi amigo y compañero de este periódico Francisco Pomares. Conmigo también lo hicieron. Todo por dar nuestra opinión. Recuerdo que es nuestra opinión, libre, en el periódico más leído de Canarias. Todo por el asunto de los concejales de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Santa Cruz y la votación a la alcaldía.

Imagino que a mi compañero José Carlos Alberto, a esa pluma distinguida que es Alfonso González Jerez, o a ese genio de la palabra que es Jorge Bethencourt (somos todos los ruinitos columnistas de El Día) les habrán hecho lo mismo. Que casualidad que todos opinemos lo mismo. Todavía podemos escribir sin miedo. Todavía hay una empresa, Prensa Ibérica, El Día, que tiene libertad. Todavía hay quienes sus frustraciones las pagan matando al que escribe.

Equivocados. Solo conseguirán el efecto contrario. Que seamos más fuertes. Todavía Jorge, Pomares, José Carlos, Alfonso y yo tenemos los principios suficientes para opinar sin miedo. Todavía escribimos lo que sentimos. El día que no ocurra, apagaremos la luz, y nuestros principios. Pero es que todavía queda mucha luz. Igual les propongo hacer un foro con público y contamos unas cuantas cosas. A más de uno, como se dice en Canarias le va a entrar cagalera. Gracias compañeros.