Mientras ciertos intereses mediáticos intentan salvar al culpable de la golfada de Santa Cruz, echándole la culpa a Vidina Espino, Teresa Berástegui y Matilde Zambudio, aquí el único responsable de la sinvergonzonería de Ciudadanos es su actual número uno: Juan Amigó, que una vez liada se quiso ir de rositas, asunto que no conseguirá conociendo a mi Santa Cruz y sabiendo que Roma (el PSOE) no paga traidores. Pero dejemos este burdel un instante y vayamos al pacto de Gobierno. Ángel Víctor Torres (PSOE) nos cuenta que en las próximas horas cerrará el pacto regional de progreso con su partido, Podemos, Nueva Canarias y la Agrupación Socialista Gomera. Y lo dice con una convicción tal, que parece que es el capitán general de los ejércitos de NC y la ASG, importándole un pimiento lo que puedan pensar de tal pacto Román Rodríguez o Casimiro Curbelo, que aún tienen sus dudas. Por su lado, Asier Antona asegura no poner líneas rojas, pero pide para pactar con CC, que sacó 20 diputados, un gobierno totalmente desestabilizado a tenor de los votos, como si estuviera deseando que CC le dijera que no. Y de presidente del Gobierno se puede quedar en nada, cosa que sería más que triste, o eso pienso yo.

Tal y como va Ciudadanos, mejor ni hablar de ellos en un gobierno regional y pensar en otra alternativa para CC, como la ASG, NC y el PP. Un pacto nada desdeñable, pero que se encuentra en el limbo, como el que asegura ya hecho el capitán general Torres. A esta hora del día no hay nada más que nervios. ¿Será capaz ciudadanos de fulminar del mapa a Juan Amigó, o en su caso, pasar de sus presuntas órdenes y atenerse a las del partido en el Cabildo de Tenerife o en el Gobierno? Si no fuera así, el ávido empresario habría ganado y habría logrado lo que él y otros, ajenos a su partido, han trazado.

@JC_Alberto