El ciclista barcelonés Sergio Garrote se colgó su segunda medalla en los Juegos Paralímpicos de Tokio al lograr el bronce en la prueba de ruta, clase H1-2, en el Circuito Internacional de Fuji.

Garrote, que disputa sus primeros Juegos Paralímpicos, finalizó tercero en la carrera de 52.8 kilómetros, con un tiempo de 1:24.25, solo superado por el francés Florian Jouanny, oro, y el italiano Luca Mazzone, plata.

"No hay que despreciar ningún metal en unos Juegos pero estoy sorprendido con la victoria del francés, que no entraba en mis quinielas para ser favorito. Me he entregado en la medida de todo lo que tenía", dijo Garrote, al termino de la prueba.

El ciclista de Viladecans, que ya ganó el oro en la prueba de contrarreloj, usa silla de ruedas desde que se cayó del andamio de una obra en 2001 que le produjo una lesión medular. Practica ciclismo con una 'handbike' desde 2015.

"Cualquier medalla aquí es una gran victoria"

El ciclista español Sergio Garrote se mostró feliz por su segunda medalla en los Juegos Paralímpicos porque cada metal en Tokio "es una gran victoria", y también recalcó que cuando vio que no podía pelear por el plata prefirió reservar fuerzas para el relevo de este jueves. "No hay que despreciar ningún metal en unos Juegos, cualquier medalla aquí es una gran victoria. Me he entregado en la medida de lo que tenía, pero también con cabeza porque mañana tengo la tercera carrera por equipos", comentó Garrote en declaraciones facilitadas por la RFEC tras la carrera.

En este sentido, el catalán reconoció que "en la última vuelta" de la prueba "viendo que era prácticamente imposible" alcanzar a Luca Mazzone, prefirió "echarle cabeza" y "dosificar" para el relevo, "una prueba muy dura, explosiva y con grandes equipos". "Tenemos que ir a por esa medalla, que es una tercera opción y que es muy bonita. En la ruta he hecho lo que he podido y también el esfuerzo de la contrarreloj fue máximo", añadió Sergio Garrote.

El de Viladecans se mostró "muy sorprendido" con la victoria del francés Florian Jouanny porque "no entraba como favorito" en su "quiniela ni para el italiano". "Nos hemos llevado una sorpresa con su grandísima carrera en un circuito extremadamente duro. Me ha dejado boquiabierto, ha hecho un carrerón", confesó.