La gimnasta estadounidense Simone Biles, que se retiró hoy de la final por equipos de los Juegos Olímpicos de Tokio, confirmó ante los medios que sufría ansiedad antes de comenzar la competición, que se adjudicó el equipo ruso por delante de EE UU y Gran Bretaña. "Cuando estás en una situación de alto estrés eso te desestabiliza. Tengo que centrarme en mi salud mental y no poner en riesgo ni a mí ni al equipo", dijo ante los periodistas, emocionada.

"Tenemos que proteger nuestro cuerpo y también nuestra mente", añadió Biles, que subrayó que antes de la final "estaba luchando contra demonios en mi propia cabeza". "Los deportistas no somos solo eso, al final del día somos cualquier otra gente", añadió, aunque evitó confirmar si participará en las finales individuales.

"Podéis hacer esto sin mí", dijo Simone Biles a sus compañeras del equipo estadounidense de gimnasia cuando les anunció que se retiraba de la final por equipos.

Simone Biles, antes de comenzar el único ejercicio que completó en la final. EFE

"Estoy orgullosa de cómo las chicas dieron un paso adelante e hicieron lo que tenían que hacer", manifestó Biles tras acabar la final, en la que Rusia ganó el oro y Estados Unidos perdió una competición por primera vez desde 2010.

"Se lo debo a las chicas, no tiene nada que ver conmigo", comentó sobre la medalla. "Estoy muy orgullosa de ellas", insistió Biles, que abandonó "por un problema de salud", informó su federación, sin más detalles.

Preguntada por lo que le dijo al resto del equipo cuando se retiró tras el ejercicio de salto, Biles indicó: "Les dije: 'habéis hecho todo el entrenamiento, podéis hacer esto sin mí, y estará bien'".