Nicky Jam fue anoche a divertirse a 'El Hormiguero',  donde acudió para presentar su nuevo single titulado Ojos rojos, además de su gira mundial. Sin embargo, el artista también habló de su trayectoria y de un momento en concreto muy duro: su paso por la cárcel.

Fue a raíz de hablar del confinamiento cuando se sinceró sobre el que fue su verdadero encierro: "La gente me decía 'me estoy volviendo loco en estos meses aquí metido' y yo decía 'muchacho, yo estuve tres años así, entre cuatro paredes'. Para mí el covid no es nada", expresó. "Yo vengo de estar encerrado en cuatro paredes donde te dicen cómo tienes que comer, el tiempo que tienes para comer, si puedes salir, si no puedes salir. Me ayudó muchísimo. Yo estaba preparado. Nadie estaba preparado para el covid, yo estaba 'ready' ya", bromeó.

Pablo Motos le preguntó por algún aspecto positivo de su paso por prisión: "Se aprenden cosas buenas también. Una de las cosas que aprendí es a disfrutar de la libertad. Uno a veces está fuera, está en un parque, y como ya lo tiene, no sabe lo grande que es, lo lindo que es. Cuando estás dentro y te dicen lo que tienes que hacer, te das cuenta de que la libertad es increíble", insistió.

"Y también aprendí que si hay alguien que tenga muchos años, como una cadena perpetua, es mejor no estar al lado de él, porque a él no le importa la vida. Es un consejo que me dieron", indicó. También definió su actitud: "Yo era el payaso de todo el mundo. No voy a decirte que fui fuerte, yo estaba asustado desde que entré, pero le hacía chistes a todo el mundo, cantaba, improvisaba, conseguía hamburguesas de McDonald's. Yo ayudaba a todo el mundo y eso me ayudó a mí. Incluso cuando me fui la gente lloró porque se fue el payasito. Ellos sentían que estaban libres porque tenían un cantante dentro, les hacía conciertitos", expresó.