Es una zona ideal para escaparse un fin de semana y salir de la rutina; y también para conocer lugares nuevos que sorprenden y vivir una experiencia inolvidable.

 

Puerto de la Cruz, excelentemente conectada por autopista con Santa Cruz y La Laguna, es una ciudad alegre. Se nota en sus gentes y en sus visitantes. Y esa animación se respira en sus calles, cosmopolitas y repletas de rincones especiales. Casi a cada paso, el viajero encontrará algo que le va sorprender.

 

Iglesias, fuentes, plazas y jardines -entre los que destaca el Jardín Botánico-;su puerto pesquero, conservado casi intacto desde que se creó, con sus pequeñas barcas;o sus múltiples alojamientos, con opciones para todos los gustos: desde los más lujosos a otros más coquetos con todo el sabor. Con el objetivo de continuar siendo un destino turístico puntero, algunos de sus hoteles se han sometido a rehabilitación, mientras que otros, además de renovarse, han ampliado su oferta para orientarla a un turismo más dirigido a las familias, con lo que ofrecen todos los servicios que ésta puedan demandar.

 

Los encantos de Puerto de la Cruz, con más de 100 años de tradición turística tienen nombres como el de la Casa de la Aduana o Castillo de San Felipe, si se desean admirar edificios históricos. Y Playa Jardín o Punta Brava, si lo que se busca es disfrutar del mar.

 

Esta ciudad turística cuenta con otras opciones. Loro Parque, por ejemplo. Un impresionante parque temático para toda la familia que impresiona por sus orcas y pingüinos, además de por sus tiburones, leones marinos, gorilas o tigres. O el Lago Martiánez, diseñado por César Manrique, y que es otra de las joyas de esta ciudad.

 

Se trata de un espectacular complejo de piscinas perfecto para pasar un día de relax y que se ha convertido en una de las postales más conocidas de este lugar.

 

Muy cerca de Puerto de la Cruz, casi pegada, se encuentra la señorial La Orotava. Una ciudad que cuenta con un casco antiguo declarado Monumento de Interés Histórico Artístico Nacional.

 

Calles adoquinadas, empinadas y salpicadas de edificios históricos y rincones llenos de encanto otorgan a esta ciudad un aire especial.

La Casa de los Balcones o la Iglesia de la Concepción son sólo dos de las visitas que se pueden realizar. Balcones de madera de tea, casas palaciegas y espectaculares jardines perfectamente conservados, como la Hijuela del Botánico, declarado Bien de Interés Cultural, no dejarán indiferente a quien visite esta villa. La Orotava guarda además otro gran atractivo. Pueblo Chico, un parque temático que reúne una magnífica muestra de maquetas de edificios y paisajes de Canarias. Este municipio es un punto de partida ideal para una excursión al Parque Nacional del Teide, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

 

Un ascenso que se convierte en una experiencia inolvidable. Inmensos paisajes de aspecto lunar y la posibilidad de subir en teleférico hasta casi la cima del pico, a 3.718 metros de altitud, hacen que la visita al Teide sea una de las más valoradas y esperadas por aquellos que vienen a la Isla. El atractivo de este Parque Nacional queda demostrado por los más de cuatro millones de personas que lo visitan cada año.

 

Los Realejos es el otro municipio que se integra en Puerto de la Cruz- Valle de a Orotava. En esta localidad, además de sus playas de arena volcánica y callaos, las zonas recreativas en pleno monte o los deportes de aventura en la naturaleza también ocupan un lugar destacado.

 

Entre las visitas que no deben faltar dentro de esta localidad son las del Mirador de La Corona, que ofrece unas vistas únicas hacia todo el Valle, o al de El Lance, desde el que se lanzó al vacío el Mencey Bentor antes de someterse y ser esclavizado por los conquistadores.

 

Pero sin duda, uno de los mayores atractivos de Los Realejos es su carácter natural, al tener casi el 50% de su terreno protegido.

 

Barranco de Ruiz, Parque Natural de la Corona Forestal, Paisajes Protegidos de Los Campeches Tigaiga y Ruiz, Rambla de Castro En este municipio, de arraigada cultura agrícola, plataneras y viñas adornan el paisaje más inmediato a un pueblo amante de sus tradiciones y fiel practicante de una hospitalidad ejemplar.

 

GASTRONOMÍA ÚNICA

 

 Puerto de la Cruz-Valle de la Orotava es una zona perfecta para quienes gustan de la gastronomía tradicional isleña;para quienes se sienten bien ante las recetas más caseras, los sabores más auténticos y los platos más sabrosos. Porque abundan los restaurantes de corte familiar, ésos en los que el visitante se encuentra como en casa y recibe la mejor comida de la tierra y un trato cercano y amable.

 

También existen establecimientos más sofisticados, en muchos de los cuales se funden tradición y actualidad para crear sabores nuevos y platos vanguardistas llamados a sorprender al paladar más atrevido. Carne fiesta, garbanzas, costillas, conejo en salmorejo, pescados y mariscos frescos, pulpo frito o guisado, dulces tradicionales.

 

Mención especial merecen los vinos. Son bien conocidas las cinco denominaciones de origen de la Isla, cuyos caldos pueden encontrarse en la práctica totalidad de restaurantes. Entre los de esta zona del norte de Tenerife destacan los de Valle de la Orotava e Ycoden-Daute-Isora, con blancos y tintos singulares y de gran personalidad.

 

ARRAIGADAS TRADICIONES 

 

Muy relacionadas con el vino son las fiestas de San Andrés, que tienen lugar a finales de noviembre en el norte de Tenerife, y que en Puerto de la Cruz-Valle de la Orotava cuentan con un sabor especial. Una fiesta que coincide con la apertura de las bodegas de vino de la Isla. Es habitual que en esas fechas, las familias y los grupos de amigos se reúnan para compartir grandes comidas de pescado salado, papas, frutos secos y vino nuevo.

 

En Puerto de la Cruz, durante la noche de San Andrés se celebra la conocida como fiesta del Cacharro. Jóvenes y turistas se reúnen en la plaza del Charco para arrastrar cacharros y objetos viejos que van golpeando contra el suelo y provocando un gran ruido por las distintas calles. En la misma plaza se celebra la Castañada, en la que se pueden degustar productos típicos de la Isla como castañas, gofio amasado, cherne, vino o batatas.

 

En La Orotava pervive en el tiempo la elaboración de las populares alfombras del Corpus Christi, con las que los vecinos tapizan las calles y plazas con pétalos de flores y arenas volcánicas del Teide. Una asombrosa muestra de arte realizado por los propios habitantes de la ciudad y que cada edición atrae a miles de visitantes.

 

Una de las celebraciones más originales de todas es la que tiene lugar en Los Realejos cada tres de mayo con motivo del Día de la Cruz, cuanto se tiene lugar una extraordinaria exhibición de fuegos de artificio, considerada como una de las mejores de Europa y que alcanzan una duración de tres horas. Unas fiestas que, aunque se viven en todo el municipio, se sienten con mayor intensidad en las populares calles de El Medio y de El Sol, en el Realejo Alto.

 

Los Realejos es también sede, cada dos años de Realexo, una cita con el pasado en la que a través de representaciones, narraciones y visitas guiadas el visitante puede conocer mejor la historia de este municipio. La última acaba de tuvo lugar el pasado mes de agosto. Las Fiestas de San Isidro de la Orotava, las del Carmen en el Puerto de la Cruz, donde se dan cita miles de personas para embarcar a la Virgen, son también muy seguidas por lugareños y visitantes.

 

ACTIVIDADES

 

Puerto de la Cruz, Valle de la Orotava y Los Realejos son tres municipios cuyas condiciones permiten la realización de todo tipo de actividades, a lo que contribuyen sus excepcionales condiciones naturales y su clima, con 23 grados de media durante todo el año. Dedicar una jornada a recorrer en 'mountain bike' o en senderismo sus espacios naturales es una experiencia para recordar. Una de las opciones más atrevidas es volar en parapente, que en Los Realejos posee unas condiciones únicas para su práctica.

 

La afición por este deporte es tal en este municipio que cada año en el mes de mayo celebra el Festival Internacional de Parapente, Flypa, que concentra durante unos días a los mejores pilotos del mundo.

 

Aunque en Puerto de la Cruz -Valle de La Orotava hay muchas más actividades por hacer: buceo, montar a caballo, surf... Hay otra actividad, más relajada pero igual de gratificante: las compras.