Piscinas y charcos naturales complementan una inmejorable oferta para disfrutar de la Isla.

Bajamar es un pequeño pero animado núcleo vacacional, famoso por su excepcional clima y por sus originales piscinas de agua de mar. Esta zona de baños está formada por dos piscinas grandes y una para niños y cuenta con todo tipo de servicios, incluidos vestuarios para los usuarios.

En la costa norte de Tenerife, el litoral es muchas veces accidentado y abundan los acantilados formados por espectaculares coladas volcánicas. Pero, en ocasiones, este mismo litoral agreste ofrece insólitos lugares para el baño, como en el Charco de la Laja, en la costa del municipio de San Juan de la Rambla. Un sendero que discurre cerca del mar lleva a esta piscina natural creada entre restos de pasadas erupciones volcánicas que alcanzaron el mar.

La costa del municipio norteño de La Guancha te ofrece un lugar de interés natural sorprendente, el Charco del Viento. Es una zona de baño natural, con aguas cristalinas y recomendable para el buceo y la pesca. 

El complejo municipal de Costa Martiánez, orgullo del Puerto de la Cruz, es uno de los más admirados ejemplos de transformación de un litoral. Un prestigioso equipo técnico, dirigido por el renombrado artista lanzaroteño César Manrique, realizó esta singular obra adaptada a la arquitectura tradicional canaria. Su lago artificial, con unos 27.000 metros cúbicos de agua de mar, realza las otras cuatro piscinas para adultos y tres infantiles, todas ellas de original trazado y belleza.

El municipio de Garachico añade a sus muchos atractivos patrimoniales una original zona de baños formada por varias piscinas naturales. El Caletón ofrece la posibilidad de disfrutar de un refrescante baño en un entorno excepcional, aunque no está de más atender siempre a las condiciones del mar, que aquí pueden incluir fuertes oleajes.

El Parque Marítimo César Manrique (Santa Cruz de Tenerife) es un impresionante complejo de ocio de 22.000 metros cuadrados de extensión, obra del célebre arquitecto César Manrique. Está compuesto por un conjunto de piscinas, zonas de esparcimiento, restaurantes e instalaciones deportivas.

En la tranquila población de Punta del Hidalgo, tradicional destino vacacional para muchos tinerfeños, es posible combinar una agradable visita a la localidad con un baño en sus piscinas naturales de agua salada directamente tomada del mar, como la del Arenisco. 

Junto al pueblo de Las Galletas se encuentra la urbanización de Ten-Bel, con una amplia piscina de agua de mar para los residentes en dicho complejo. Muy cerca de esta piscina parte un sendero que recorre el bello y acantilado litoral, que dispone de varios accesos para bañarse en el mar.