Mejores recetas para San Valentín

San Valentín está a la vuelta de la esquina y, si tienes pareja, probablemente querrás realizar un plan especial.

Ir al cine, hacer un viaje juntos o volver al lugar donde todo comenzó son cosas que seguramente tengas en mente. Pero, si hay un plan que nunca falla en esta fecha especial es una cena romántica. Porque, seamos sinceros, a todos nos gusta que nos cocinen algo rico.

Pues si este es tu caso y quieres preparar a tu pareja una velada que nunca olvide, te dejamos algunos platos que puedes preparar y con los que seguro que triunfas.

Ensalada de fresas y burrata

Si hay una fruta afrodisiaca por excelencia son las fresas. Por lo que nada mejor que empezar nuestra cena con una ensalada en la que ellas tengan el protagonismo. Eso sí, con una buena burrata.

Este plato prácticamente no tardarás nada en hacerlo. Puesto que solo tienes que lavar bien las fresas y picarlas por la mitad y colocarlas en una bandeja junto a la burrata. Si quieres un toque aún más especial, añade unas anchoas encima del queso. Puedes aliñarla con aceite virgen extra y vinagre de Módena.

Ostras gratinadas

Uno de los platos que no pueden faltar en una noche romántica son las ostras. En este caso, te proponemos que las hagas gratinadas.

Para elaborar este sencillo plato necesitas: ostras, queso crema, cebollines, queso roquefort y parmesano.

El primer paso, como es lógico, es abrir las ostras para sacarlas de la cáscara. Luego, se hace una mezcla con el queso crema, el roquefort y los cebollines muy bien picados. Luego, se rellena la cáscara de la ostra con esta mezcla y se ponen encima.

El último paso es cubrir cada una con bastante parmesano y dejarlas gratinar al horno hasta que estén doradas.

Tarta de tres chocolates

Por todos es sabido que el chocolate es uno de los afrodisíacos más conocidos. Sobre todo cuanta más cantidad de cacao tenga. Por ello, de postre te recomendamos una tarta de tres chocolates que será muy fácil de hacer.

Para ello necesitas: tres tabletas de chocolate (negro, blanco y con leche), nata líquida para montar, cuajada en polvo, leche, galletas maría y mantequilla.

Su elaboración es muy fácil, aunque tendrás que repetir el proceso tres veces para las capas de la tarta. Aunque, antes de eso, empezaremos por la base. Lo primero es triturar las galletas hasta que sean un fino polvo y añadir mantequilla derretida para formar una masa, que se coloca como base en el molde.

El siguiente paso es hacer las capas de chocolate. Para ello, en un caldero se ponen 200 ml de nata con 100 ml de leche a calentar. Luego se añaden los trozos de chocolate negro para que se diluyan. En otro caldero mezclamos los otros 100 ml de leche con la cuajada para disolverla sin grumos. Se mezclan ambos líquidos durante un par de minutos sin que se pegue y, una vez que hierva, se retira del fuego. Esta primera capa se echa sobre la de galletas y se deja reposar.

Este mismo procedimiento habría que hacerlo con el chocolate con leche y el chocolate blanco. Por último, déjala en la nevera varias horas para que cuaje bien.

La tarta te quedará muy rica independientemente de su forma, pero si quieres un toque especial para San Valentín, utiliza un molde en forma de corazón.

Cóctel

Y para acompañar la velada, nada mejor que un cóctel. En este caso, te proponemos el conocido como 'beso de fresa'. Aunque hay muchas versiones, te proponemos que lo hagas con whisky.

Para ello necesitas una medida de whisky, otra de jarabe de fresa, fresas, hielo picado y nata líquida. Tan solo tienes que batir todos los ingredientes, menos la nata, ya que esta la usarás para decorar. Para servirlo, utiliza una copa alta y pon una fina capa de nata encima. ¡Listo para probar!