A lo largo de los últimos años, se ha avanzado mucho en el estudio de asteroides y cometas. Algunos de estos cuerpos celestes tienen órbitas que los acercan a la de la Tierra, llamados Objetos Cercanos a la Tierra (NEO, por sus siglas en inglés).

Hoy en día, contamos con las oficinas de Defensa Planetaria que, a pesar de lo que se muestra en Hollywood, abordan los peligros de impacto de los NEOs. De hecho, nos encontramos ante una época en la que se están desarrollando misiones para demostrar tecnologías con el fin de proteger la Tierra, y determinar su efectividad en el caso de que deban utilizarse ante una posible amenaza de impacto de asteroide.

El Museo de la Ciencia y el Cosmos (MCC) a través de la exposición temporal ‘Mira Arriba’, quiere dar a conocer más acerca de estos asteroides y cometas que merodean por nuestro Sistema Solar, la importancia de su estudio y cómo podemos protegernos de posibles impactos en el futuro. La exposición, que podrá visitarse de forma libre al adquirir la entrada al museo, estará abierta desde el 12 de agosto hasta el 16 de octubre. En ella encontraremos algunos de los valiosos meteoritos de la colección del Museo de Ciencias Naturales de Tenerife (MCN), junto con piezas didácticas y recursos audiovisuales que el Museo de la Ciencia y el Cosmos ha preparado.

Colección de meteoritos del Museo de Ciencias Naturales

El Museo de Ciencias Naturales de Tenerife cuenta con una importante colección de meteoritos, recolectados, en su mayoría, desde el año 1985 por investigadores de dicho museo en diversas expediciones a la zona Sur de Marruecos, Sahara, Mauritania y Senegal. Siete de estos meteoritos, por su importancia científica −condritas ordinarias− fueron analizados y clasificados de acuerdo con las normas de The Meteoritical Society, por lo que forman parte de los catálogos internacionales.

Además, la colección cuenta con numerosos materiales provenientes de varias estructuras geológicas localizadas en el norte de Mauritania que podrían ser cráteres de impacto, recogidas por investigadores del museo y de otras instituciones científicas (Instituto de Geociencias del CSIC, Universidad Complutense, etc.) durante tres campañas científicas realizadas en 2002, 2003, y 2007. Estas campañas fueron coordinadas por el Dr. Francisco García-Talavera, asesor emérito del museo.

Uno de los objetivos de estas expediciones era analizar el efecto que pudo tener la formación de estos cráteres de impacto, y el considerable desplazamiento de materiales a la atmósfera que conllevaría, sobre la paleobiodiversidad de la zona circundante, incluida la de las islas Canarias.