Yara Burkhalter utilizó para su elaboración tres diferentes soportes: papel occidental, papel japonés y papel de esbozar chino. El papel japonés puede ser a su vez de dos tipos: muji (de fabricación industrial, típicamente empleado en paredes y puertas correderas de hogares japoneses) y kozo (de fibra de morera, de textura más compleja).

La exposición propone un recorrido por la incipiente obra artística de Burkhalter, que profesionalmente se ha dedicado sobre todo a quehaceres artesanales y prácticos, ya que su formación ha sido muy heterogénea en diversas ramas de las artes aplicadas. Por este motivo la muestra es igualmente híbrida y, como indica su título, variable. Las influencias estéticas van desde la geometría islámica a la pintura clásica china y al grabado japonés de la era Meiji y también anterior a ésta.