El Ayuntamiento de La Orotava tiene previsto aprobar hoy un presupuesto municipal de 33,8 millones de euros para el ejercicio de 2013, lo que supone una reducción del 3,88% respecto a 2012 y el regreso a las cifras que manejaba el consistorio en el año 2004. El concejal de Hacienda, Juan Dóniz (CC), define este presupuesto como "realista, prudente y austero, reflejo del actual clima económico".

Una de las novedades del presupuesto de 2013 es que el consistorio no solicitará nuevos préstamos, tal y como sucedía de forma habitual en los últimos años.

En el apartado de ingresos, los impuestos indirectos bajan un 40% ya que se incluye, entre otros, el impuesto de construcción, "cuya recaudación es menor que cuando se creó en el año 1999". Las transferencias corrientes, en las que se incluyen los ingresos externos, disminuyen en 945.000 euros, un 5,75%.

Dóniz lamenta "la eliminación de las previsiones de transferencias de la Comunidad Autónoma destinadas a ayudas de emergencia social, que en 2012 ascendieron a 100.000 euros, o de ayuda al mantenimiento de escuelas infantiles, que era de 120.000 euros. Pese a estos recortes, el ayuntamiento mantendrá esos gastos.

La recaudación por impuestos directos sube un 11,59%, casi un millón de euros, "debido a que el IBI subió un 10% por imposición del Estado, y también por la afloración del fraude en el pago de esta contribución urbana por parte de numerosos vecinos", destaca Dóniz. También se logrará una mayor recaudación por el aumento del impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica y la eliminación del beneficio fiscal para parte de los vehículos de mayor antigüedad, lo que generará unos 200.000 euros extra.

El apartado de Tasas y Precios Públicos asciende a algo más de 8 millones. Sube un 2,73% derivado del incremento de las ordenanzas para el próximo ejercicio.

En el apartado de gastos, Personal es la partida que experimenta un mayor descenso en términos absolutos (-1,66 millones), lo que supone un descenso del 13,30% respecto a 2012. Y pasa de abarcar casi el 36% del total al 32%. La mayor parte de este descenso es consecuencia de la eliminación de la mayoría de las subvenciones destinadas a la contratación de personal en programas de Fomento de Empleo. "Descontado dicho efecto, la disminución real es de un 2%, unos 261.000 euros, por la amortización de diversas plazas de funcionarios ahora vacantes por jubilación", afirma Dóniz.