Partido Popular

Feijóo multiplica su agenda nacional para contrarrestar el impulso internacional de Sánchez

El líder del PP potenciará su agenda de política nacional tras presentar este domingo el programa marco de las autonómicas y municipales y volcando el partido en el 28-M

Feijóo interviene durante el comité ejecutivo nacional del PP.

Feijóo interviene durante el comité ejecutivo nacional del PP. / Tarek

Paloma Esteban

Pasada la moción de censura de Vox, el PP activa formalmente la maquinaria electoral. “Desde ahora solo podemos pensar en mayo. Nada más”, explican en la dirección nacional, reconociendo que la operación de Ramón Tamames y Santiago Abascal les obligó a definir una estrategia que no buscaban. La apuesta fue tajante: el perfil más bajo posible para Alberto Núñez Feijóo y un discurso muy medido que justificara la abstención en el Congreso y evitara rasguños importantes. “Los pudo haber y los evitamos”, zanjan en el grupo parlamentario.

El domingo, Feijóo presenta en Guadalajara el programa marco de las elecciones autonómicas y municipales que ha estado dirigiendo el exministro Íñigo de la Serna y la senadora Carmen Fúnez, ascendida ya a vicesecretaria de Políticas Sociales dentro de la cúpula. Desde ese momento, el partido se centrará por completo en “la primera vuelta” de las generales.

Feijóo potenciará su agenda de política nacional en contraposición al nuevo impulso internacional de Pedro Sánchez, que en solo dos semanas habrá unido un Consejo Europeo, una Cumbre Iberoamericana en República Dominicanaun viaje oficial a China y otra de las giras europeas que ha preparado antes de asumir la presidencia española de la UE. En esta ocasión, justo durante la Semana Santa, el plato fuerte será Italia. En el PP tienen asumido el potente perfil exterior del presidente del Gobierno, que la ven como su principal fortaleza en mitad de las crisis domésticas que afronta cada semana, y que es también la gran debilidad de Feijóo.

Con la excepción de la cita preparatoria del PP europeo antes del Consejo a la que acuden todos los líderes conservadores (también lo hizo el dirigente gallego, que aprovechó para mantener una reunión bilateral con Ursula von der Leyen) y una visita exprés la semana que viene a Lisboa, el líder conservador se volcará en las elecciones autonómicas y municipales, renunciando por ahora a ampliar su presencia en el exterior. “Sánchez que siga centrado en su agenda internacional. Pero los españoles tienen otras prioridades”.

En Génova mantienen la tesis de que el Gobierno “se equivoca” si cree que la ciudadanía premiará exclusivamente sus viajes internacionales, la invitación del presidente chino justo después de verse con Putin o sus contactos en Bruselas. “Política de alto vuelo. Está muy bien elevarse pero la gente en España está a otra cosa. Las preocupaciones son distintas y lo doméstico, hacer la compra o poder pagar la hipoteca es lo que realmente importa”, zanjan distintos dirigentes.

“Velocidad de crucero"

“Ya hay que buscar la velocidad de crucero. Entrar en la dinámica y no parar”, dicen en el equipo de Feijóo. Los principales miembros de la cúpula conservadora se repartirán los territorios en función de lo que pidan los líderes territoriales en los próximos dos meses.

Este sábado Feijóo acompaña a Isabel Díaz Ayuso en un acto que busca afianzar el voto hispano dentro de la Comunidad de Madrid. De los 450.000 extranjeros que pueden participar en las elecciones de mayo, más de 200.000 proceden de países latinoamericanos con acuerdos de reciprocidad. Es decir, que votarán en el mes de mayo.

La elección de Guadalajara para la puesta de largo del programa marco (que luego las autonomías desarrollarán en función de sus prioridades) tiene una doble intención: dar visibilidad al candidato de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, que a pesar de las dificultades para arrebatar la presidencia a Emiliano García-Page, varias encuestas dan la posibilidad sumando con Vox. Y, por otro lado, el electorado de esa provincia es clavado al de Madrid.

La moción de censura de Vox no ha alterado la hoja de ruta electoral que tiene Feijóo y que ha hecho extensible a sus barones con algunas excepciones como la de Ayuso: seguir mordiendo el electorado de centro para restar fuerza al PSOE, confiando en que los electores de Vox “volverán solos” por la utilidad de ser la única alternativa. 

La posición de debilidad en la que ha quedado el partido de Abascal ha hecho, además, que los populares vean aún más clara la estrategia de alejarse de los ultras y diferenciar su posición. La ‘ruptura’ electoral de Ayuso con Vox después de que Rocío Monasterio le tumbara su medida fiscal estrella para atraer patrimonio extranjero (que se suma a su negativa en los Presupuestos) refuerza el portazo de los de Feijóo: “Cada uno por su lado. Tenemos caminos distintos”, zanjan.