Pleno del Congreso

Igualdad gana: el Congreso dará el sí a una ley trans sin recortes

La ministra de Igualdad, Irene Montero, junto a la directora general de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI, Boti García Rodrigo.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, junto a la directora general de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI, Boti García Rodrigo. / EFE

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"Nos han querido hacer creer tantas veces que no llegaríamos a esta votación": hasta la ministra de Igualdad, Irene Montero, reconocía en el Pleno del Congreso de los Diputados la dificultad en la tramitación de la ley trans. Pese a un camino plagado de desavenencias y desencuentros, el proyecto recibirá mañana el respaldo definitivo de la Cámara Baja, sin recortes de calado, al contar con los apoyos de los socios parlamentarios y el visto bueno definitivo del PSOE.

La pelea ha concluido, la apuesta legislativa del Ministerio de Igualdad para garantizar los derechos y proteger al colectivo LGTBI y a las personas trans será ley y la fórmula consensuada por el Congreso se acerca bastante al texto consensuado en el seno del Gobierno.

"Hoy el Congreso cierra armarios y abre puertas y ventanas parta asegurar vidas libres a todas las personas trans y LGTBI. (...) Esta ley debe continuar su trámite en el Senado, ya estamos más cerca de que sea realidad", defendía, aliviada, Montero desde la tribuna de la Cámara Baja, que debatía este miércoles la aprobación del dictamen del proyecto de ley. PSOE, Unidas Podemos, ERC, PNV, Bildu, Junts, Compromís, BNG, Más País ya han adelantado su apoyo al texto, que se votará este jueves.

Así, la ley salvará con holgura su último trámite en el Congreso. "Espero que sintáis que este Parlamento, esta sociedad y que vuestro país os da la mano con firmeza y que no la va a soltar nunca más. (...) Reconocemos la ciudadanía de pleno derecho de todas las personas LGTBI y trans", ha dicho la titular de Igualdad a los colectivos LGTBI que han presenciado el debate.

Esa holgura en la aprobación contrasta con las tensiones que han caracterizado la tramitación de la ley trans desde que comenzó a discutirse en el seno del Gobierno, con la reacción mantenida de una parte del PSOE y de cierto sector del feminismo. Se consigue finalmente "lo que parecía imposible" y sin recortes ni modificaciones que atenten contra el espíritu de la norma impulsada por Igualdad, principalmente la autodeterminación del género.

"Supimos siempre que el camino merecía la pena, que sólo intentarlo merecía la pena, conseguirlo aún más. (...) La fortaleza de nuestra democracia se expresa conquistando derechos. Especialmente estos días, hacer valer la democracia frente a los reaccionarios dentro y fuera de estas paredes significa conquistar derechos", ha enfatizado.

El partido "determinante"

El PSOE ha querido aprovechar el debate del proyecto de ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI para dejar atrás los sinsabores provocados por la división interna de los socialistas frente a esta norma.

La secretaria socialista de Igualdad, Andrea Fernández, ha sido contundente a la hora de reivindicar el papel de su partido en la consecución de los avances en derechos LGTBI.

"En más de 40 años de democracia, el PSOE ha acompañado y liderado todas las conquistas en derechos sociales. Lo siento por aquellos que esperaban que en esta ocasión hiciéramos una excepción. Una vez más, hay una página de nuestra historia que situará al PSOE junto a aquellas personas que han visto amenazada su forma de vivir por ser quienes son. Ni les fallamos en el pasado, ni les fallamos ahora, ni les fallaremos en el futuro", ha dicho Fernández, que ha presumido de que su grupo ha sido "determinante" para la aprobación de esta ley.

La secretaria de Igualdad del PSOE ha reconocido que su partido quería una ley "mejor" y "más garantista", pero ha precisado que "en democracia siempre se gana, incluso cuando aparentemente se pierde". Las enmiendas socialistas que sembraron la discordia e hicieron tambalearse el futuro de la ley fueron retiradas después de que ningún partido las apoyara en la Comisión de Igualdad, algo que el PP le ha recriminado: "¿Por qué se arrodillan ante sus socios de Podemos, por qué claudican y renuncian a sus propios principios? Es demasiado alto el precio que pretenden pagar para que Sánchez siga en la Moncloa", ha subrayado la diputada popular Rosa Romero.

Las mujeres trans son mujeres

Los ecos de los ataques a la ley trans han llegado a la Cámara Baja. El rechazo de ciertos sectores a la inclusión de las mujeres trans en el movimiento feminista y el argumento recurrente de que la ley trans va a derribar avances feministas ha sido muy criticado en el Pleno.

Hasta en dos ocasiones ha negado que los derechos del colectivo LGTBI puedan colisionar con el feminismo: "Ser feminista no es negar la existencia de las personas trans. (...) Les aseguro que entre la gente corriente de este país es perfectamente compatible el feminismo con los derechos LGTBI".

También la ministra de Igualdad ha querido incidir en que "las mujeres trans son mujeres", tras denunciar y pedir perdón al colectivo por el hecho de que la "transfobia se haya hecho un hueco en el debate público".

En el mismo sentido, Mireia Vehí (CUP) ha aseverado que "los derechos de las personas trans no restan".

Desde la derecha, tanto Cs como el PP se han vuelto a quejar de la celeridad en la urgencia de la tramitación de la ley, pero mientras la formación naranja reconoce los avances en derechos, el grupo popular ha asegurado que se trata de una norma plagada de inseguridad jurídica que generará problemas en su aplicación cuyas consecuencias, ha sostenido la diputada Rosa Romero, pagarán mujeres y menores.

Alivio y alegría en los colectivos

Los colectivos LGTBI y trans han celebrado que el Congreso vaya a aprobar la ley mañana, después de tantos años de lucha.

"Esta ley ha sido un reto y mañana estará aprobada, pero hoy ya los partidos mayoritarios que están con la democracia y que están con los derechos humanos han dicho que votan sí. (...) Cambiará nuestras vidas, cambiará nuestra sociedad", ha declarado, emocionada, la presidenta de la FELGTBI+, Uge Sangil.

Por su parte, la presidenta de la Federación Plataforma Trans, Mar Cambrollé, ha ensalzado que por primera vez en la democracia española se van a reconocer "con dignidad" los derechos de las personas trans: "Es un momento histórico para nuestro colectivo. La democracia ha cumplido una deuda con las personas trans", ha sentenciado Cambrollé.