En plena consulta de Junts para decidir si sale o no del Govern, el PSC ha irrumpido circunstancialmente rompiendo una lanza a favor de los que apuestan por continuar en el Executiu. "Queremos que Giró siga siendo 'conseller'", ha defendido el diputado socialista Òscar Ordeig en el Parlament durante el debate de su moción sobre la situación económica. Según ha argumentado y mirando hacia la bancada del Govern, a Cataluña no le beneficia que la persona encargada de debatir los presupuestos en un contexto económico adverso "no sepa si el lunes estará sentado aquí".

Los socialistas, que mantienen su mando tendida inamovible para aprobar las cuentas y que han iniciado conversaciones con Giró, han defendido que no es momento de elecciones ni tampoco de crisis en la Generalitat. "Toca gobernar, responsabilidad y estabilidad", ha insistido Ordeig, que se ha dirigido a ERC para pedirle que es momento de ser "valiente" y de dejar de lado "dogmas y prejuicios". Y es que los republicanos continúan rechazando el apoyo de los socialistas para aprobar los presupuestos, incluso en el escenario que Junts acabe saliendo del Govern.

"Si hay buena disposición, ¿por qué no se pueden pactar? ¿Saben quién gana si no nos ponemos de acuerdo y esto salta por los aires? Los populistas", ha hecho hincapié el diputado del PSC apelando a los grandes consensos que abandera Salvador Illa. De poco ha servido la insistencia. En la réplica, el diputado de ERC Lluís Salvadó se ha reafirmado en que las cuentas, que es una ley trascendental, por "coherencia" solo se van a negociar con los grupos que defienden la autodeterminación y la amnistía, es decir, con Junts, la CUP y los comuns. Cosa que no es incompatible, ha puntualizado, con que se produzcan aproximaciones para rechazar rebajas fiscales y apostar por un modelo más redistributivo.

Salvadó también ha dejado caer que la prioridad será lograr que las cuentas prosperen, pero que de no hacerlo el Govern "tendrá mecanismos de corrección para adaptarse a las circunstancias. Junts, por su parte, por boca del diputado Ramon Tremosa, ha sido especialmente crítica con los socialistas. De hecho, ha asegurado que el PSC es un "cero a la izquierda" defendiendo los intereses de los catalanes en Madrid. Ha hurgado, por ejemplo, en que todavía no se ha reformado la LOFCA y en el déficit fiscal que lastra las arcas catalanas.