Celestino Corbacho dice adiós a la política. El veterano exdirigente del PSC, recordado por haber sido alcalde de l'Hospitalet de Llobregat y ministro de Trabajo, ha ejercido de concejal independiente de Ciutadans en el Ayuntamiento de Barcelona desde 2019, cuando se unió a la lista con la que el exprimer ministro francés Manuel Valls se aventuró a competir por el mando en la capital catalana. Corbacho ha anunciado esta tarde en la comisión de Ecología y Urbanismo en el consistorio que abandonará la escena pública en las próximas semanas.
"Esta renuncia es una decisión personal pero, sobre todo, es una promesa a mi mujer que antes del 14 de noviembre de 2022, que es mi aniversario, dejaría mis responsabilidades políticas e institucionales", ha expresado Corbacho, que ha regado sus intervenciones en la comisión con una multitud de recuerdos y anécdotas de su largo periplo en la política catalana y española. Cs ha explicado que el concejal mantendrá el cargo hasta el pleno municipal de la próxima semana. A partir de octubre le relevará Noemí Martín, hasta ahora consejera de los liberales en el distrito de Nou Barris. Irónico, el concejal ha asegurado que desprenderse de responsabilidades públicas ahora "es la mejor decisión" que ha tomado en su vida. Corbacho comandó el Ayuntamiento de L’Hospitalet de Llobregat bajo las siglas del PSC entre 1994 y 2008, cuando se trasladó a Madrid para ocupar un puesto en el Consejo de Ministros del segundo gobierno del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero. Asumió la cartera de Trabajo durante dos años. Aparte, presidió entre 2004 y 2008 la Diputación de Barcelona, donde ahora ocupa un escaño en representación de Cs.
A favor de la investidura de Colau
El histórico mandatario socialista fue desligándose del PSC a medida que el 'procés' independentista tomaba impulso. De su paso por el Ayuntamiento de Barcelona sobresale que fue uno de los tres de los seis concejales de la candidatura de Barcelona pel Canvi que impidió con sus votos que el republicano Ernest Maragall fuera investido alcalde tras las elecciones municipales de 2019. Corbacho unió su voto al del Valls y la actual líder de la formación derechista Valents, Eva Parera, para investir a Ada Colau y frustrar que la Alcaldía pasara a manos de un independentista.
La votación provocó la ruptura entre Cs y el exprimer ministro francés. Pese a desmarcarse de la orden de la formación naranja, Corbacho se mantuvo fiel a la disciplina del partido liberal, en el que nunca ha llegado a afiliarse.
