La Comunidad de Madrid analizará en detalle el decreto con medidas de ahorro energético aprobado por el Consejo de Ministros que obliga, entre otras cosas, a apagar los escaparates comerciales a partir de las diez de la noche durante 16 meses. Y después de estudiarlo en profundidad decidirá si “aplica o no las medidas”. Así lo ha matizado el vicepresidente y hombre fuerte de Isabel Díaz Ayuso, Enrique Ossorio, después de que la presidenta se mostrara mucho más contundente anoche: “Por parte de la Comunidad de Madrid no se aplicará. Madrid no se apaga”.

Según publica El Periódico de España, la reacción de la dirigente madrileña llegó poco después de hacerse públicas las primeras medidas del plan de contingencia del Gobierno que persigue un ahorro energético total del 7% comprometido con Bruselas. En todo caso, las medidas de ayer son las primeras. En septiembre habrá nuevas. Según dijo la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, son de obligado cumplimiento.

Pero Ayuso no esperó y dejó claro que en su región no se aplicarían. Ossorio, que visitaba un colegio público de San Sebastián de los Reyes este martes, pisó el freno y explicó que primero analizarán el real decreto “y si no es constitucional, lo recurrirán al TC. “Todo aquello que nos parezca negativo para los madrileños y también, por supuesto, para los españoles, la Comunidad de Madrid, dentro de su ámbito de competencias, que no sea normativa básica, evidentemente no lo va a aplicar”, zanjó.

Ossorio aseguró que Madrid “no es como otras comunidades bien conocidas y que el Gobierno consiente que incumplan”. “No nos gusta nada de ese ejemplo y, por tanto, cumplimos las leyes”, dijo, advirtiendo al mismo tiempo que en lo que esté dentro de sus competencias, por ejemplo en materia de comercio, analizarán la normativa y, en la medida que la Comunidad pueda ser competente, “no lo aplicaríamos”.

El vicepresidente madrileño también tildó de “injerencia realmente descomunal” que el Ejecutivo “diga cuál es la temperatura que debe haber en un lugar comercial, en un restaurante, en un cine, porque ya el comerciante y el empresario sabe que es la temperatura que debe poner para ahorrar energía por una parte, pero no para hundir el negocio”. 

Las críticas en la Puerta del Sol y en el resto del PP se centran ahora en que Sánchez “debe buscar medidas de fondo que resuelvan el problema” y no solo hablar de quitarse la corbata”. “Yo creo que hoy mismo el señor Sánchez debería renunciar al Súper Puma y al Falcon. El señor Sánchez tiene que ser solidario con los españoles, tiene que hacer algo o cesar a seis o siete ministros de esos 23”, zanjó Ossorio.

Génova muestra "comprensión"

Pasando de puntillas por el asunto, Elías Bendodo, coordinador general del partido, aseguró “entender la desesperación de cualquier líder autonómico” ante “los bandazos” del Gobierno: “Lo que primero iba a ser una recomendación acaba siendo una imposición a golpe de decreto”, dijo el presidente del PP malagueño.

La dirección nacional avala por boca de Bendodo que “cada ayuntamiento y comunidad será el que decida si aplica las medidas”. “Tienen libertad”, dijo el dirigente nacional popular, insistiendo en su comprensión “ante la desesperación de un Gobierno que aprieta el cinturón al resto y no el suyo propio”.