Unidas Podemos se hace un hueco a la izquierda del PSOE. El socio minoritario del Gobierno comenzó el martes el debate sobre el estado de la nación con un idilio con Pedro Sánchez tras su anuncio de crear nuevos impuestos a la banca y a las eléctricas. Los morados se arrogaron el mérito de este “cambio de rumbo”, pero desde entonces se han esforzado por resituarse en el tablero con propuestas más ambiciosas para tratar de marcar el camino a los socialistas. Esta estrategia también se ha visto en la fase final del debate, con las resoluciones registradas en el Congreso con las que pedían al Gobierno adoptar medidas marcadamente de izquierdas como la subida de impuestos a grandes supermercados, una potente reforma fiscal o la creación de una empresa pública de energía.

Los morados han logrado su objetivo de adelantar por la izquierda al PSOE, que este jueves tarde sólo ha votado a favor de tres de las 15 iniciativas presentadas por su socio de coalición, las relativas a feminismo, cultura y refuerzo de la educación pública. Aunque en un primer momento también se comprometieron a apoyar la iniciativa que pedía limitar la presencia de casas de apuestas cerca de centros de educación, finalmente los socialistas se bajaron de este último apoyo. Unidas Podemos, en cambio, sí ha apoyado todas las propuestas de resolución presentadas por los socialistas, al considerar que eran textos más bien genéricos en los que "era difícil no estar a favor", según fuentes moradas.

Las votaciones de este jueves en el Congreso, que se han prolongado durante más de una hora y media, no obligan al Gobierno a tomar medidas pero sí marcan posición política de los distintos partidos y dan una fotografía de la situación actual de alianzas. Y es en este punto, en el de la escenificación, donde Podemos busca resituarse como el gran referente de la izquierda con el objetivo de arrogarse el sello morado en caso de que se adopten en el futuro medidas de este cariz. Y paradójicamente, la soledad que ha escenificado en el Parlamento, con un alejamiento de los socialistas en la mayor parte de sus propuestas, le ha venido bien para reforzar su posición. Aunque haya llevado a que sólo es hayan aprobado 3 de sus 15 iniciativas.

Muy distinta es la posición del PSOE, que ha logrado sacar adelante sus 15 propuestas de resolución apoyando todas ellas en los morados y gracias a los acuerdos con ERC en cuatro de ellas, donde aceptaron enmiendas de los republicanos. Además, también incluyeron una enmienda del PP en una iniciativa relativa a la coordinación de la Presidencia europea de España o de Ciudadanos en una de ciencia e innovación.

Las tres propuestas de Unidas Podemos aprobadas gracias a los socialistas pedían al Gobierno extender la titularidad pública a las escuelas de 0 a 3 años o fomentar la Formación Profesional (FP) pública en materia de educación. En cuanto a igualdad, establece fijar el lenguaje inclusivo y la paridad en los organismos públicos o declarar los cuidados como derecho fundamental. Y en materia de reconocimiento de la cultura, plantea incluir las lenguas oficiales y propias en el Instituto Cervantes, además de que todos los centros culturales estatales (museos o bibliotecas) promuevan "la igualdad, los derechos LTGBI, la memoria democrática, la fiscalidad justa o la transición ecológica".

Sin embargo, Unidas Podemos se ha quedado en minoría en algunas de las propuestas consideradas más de izquierdas, como la creación de una empresa pública de energía. En materia de inmigración, pedía condenar lo sucedido en la valla de Melilla y regularizar a los migrantes sin papeles, además de establecer canales seguros de entrada. Sobre Sanidad, reclamaba incrementar en los presupuestos la inversión sanitaria al 7,5% del PIB, además de incluir en el Sistema Nacional de Salud a los extranjeros o incluir entre los servicios bucodentales entre los servicios.

En materia de fiscalidad, Podemos pedía una importante reforma fiscal, que incluía la subida del IRPF para quienes percibiesen más de 10.000 euros mensuales o la subida de 10 puntos en Impuesto de Sociedades para grandes superficies, así como la bajada de impuestos para las PYMEs con una facturación menor al millón de euros.