Las autoridades de Reino Unido han impuesto este viernes un nuevo paquete de sanciones contra los familiares del presidente ruso, Vladímir Putin, y personas de su círculo cercano en respuesta a la guerra de Ucrania.

La ministra de Exteriores británica, Liz Truss, ha indicado en su cuenta de Twitter que estas nuevas medidas tienen como objetivo la "red turbia que sostiene el lujoso estilo de vida de Putin" y ha recalcado que Londres está "aumentando la presión sobre todos aquellos que ayudan e instigan la agresión de Putin hacia Ucrania".

Entre los sancionados se encuentran su exmujer Liudmila Ocheretnaya, varios miembros de su familia y personas cercanas al presidente ruso. Truss ha aseverado que Reino Unido "seguirá imponiendo sanciones para frenar la agresión contra Ucrania".

Así, la lista de sancionados de Reino Unido incluye ahora a más de un millar de individuos y cientos de entidades. En un comunicado, Downing Street ha señalado que Putin "depende de sus familiares y sus amigos de la infancia, además de unas élites que se han beneficiado de su permanencia en el poder".

Las sanciones impuestas este viernes "aíslan a estos familiares y personas encargadas de financiar las actividades de Putin" y ejercen una mayor presión sobre el Gobierno ruso ante la invasión de Ucrania.

El Gobierno británico amplió este domingo sus sanciones contra Rusia y Bielorrusia para incluir aranceles a intercambios comerciales por valor de 1.988 millones de euros (1.700 millones de libras esterlinas), así como la prohibición de exportar determinados productos británicos, para aumentar la presión económica sobre Moscú por la invasión de Ucrania.

Rusia pide no viajar a Reino Unido

El Ministerio de Exteriores de Rusia ha recomendado a la población evitar en la medida de lo posible viajar a Reino Unido y solicitar visados. En un comunicado, el Gobierno ha señalado que "teniendo en cuenta el curso extremadamente poco amistoso de los acontecimientos, recomendamos a los ciudadanos rusos que no viajen a Reino Unido", indica el documento.

La recomendación ha sido difundido poco después de que el Ministerio de Exteriores recibiera varias quejas por parte de ciudadanos rusos que han alegado que era "prácticamente imposible" o "extremadamente difícil" obtener visados.

"Hasta que se normalice la situación actuaremos de la misma forma con los ciudadanos británicos que quieran sacarse el visado", ha advertido.